Según su testimonio, el menor permaneció en la vivienda desde el 22 de julio casi dos semanas antes del hallazgo y no desde el 28, como informó previamente la Fiscalía. Aseguró que la madre del niño le solicitó mil pesos para cambiarse de casa y después, presuntamente lo dejó en la vecindad, por lo que decidieron cuidarlo.

La imputada relató dos caídas que, según ella, provocaron lesiones: la primera, en el baño, con un golpe en la cabeza que atendió con un médico. La segunda, también en el baño, habría causado una herida con abundante sangrado.

Estas declaraciones fueron expuestas por una defensora de derechos humanos presente en la audiencia, aunque no se presentaron pruebas periciales que respalden dicha versión.

Actualmente, los imputados permanecen bajo prisión preventiva y la siguiente audiencia está programada para el 11 de agosto.

El caso ha generado profunda indignación en Los Reyes La Paz, donde vecinos y colectivos han realizado marchas y concentraciones para exigir justicia por Fernando. Habitantes señalan que la violencia contra menores y la impunidad son problemas que persisten en el municipio, mientras que familiares del menor piden que no se minimice el hecho y que se castigue con el máximo rigor a los responsables.