TLALNEPANTLA, Edomex., 17 de julio de 2025.- Cuando Arturo Ruelas comenzó a formar su banda de ska en 1992, nunca quitó el dedo del renglón: el proyecto llamado Los Estrambóticos sería duradero. A pesar de los obstáculos para armar una agrupación —especialmente si era de ska— el sueño se mantuvo firme.

Con la alegría y experiencia que otorgan los años, pero sin perder la esencia irreverente que los caracteriza, Pino Ruelas y compañía declararon a QUADRATÍN EMX sentirse felices de seguir en la música, haciendo y deshaciendo un ska divertido, inteligente, con mensajes amorosos, tiernos, reflexivos, y siempre cargado de un humor muy particular.

“Lo más interesante es que, aunque nuestro primer casete fue un éxito y muchas canciones se volvieron tradición, nosotros no nos quedamos ahí. Preferimos seguir creando rolas que gusten tanto a quienes crecieron con el ‘Peter Punk’, ‘Mi Tamagochi’, como a las nuevas generaciones. Es un gusto ver que somos una banda familiar, donde padres e hijos disfrutan juntos nuestros conciertos. Eso pocos pueden presumir”, comentó Ruelas.

Con esa autenticidad como bandera, consideran que el reto para las nuevas bandas de ska es mantener el equilibrio en redes sociales y ser realmente genuinos. “Va a sobrevivir quien tenga autenticidad. Eso no lo suple nadie. La inteligencia artificial puede ser herramienta útil, pero lo que uno siente no lo puede sentir alguien más. Los músicos de verdad continuarán”, reflexionaron.

Para celebrar más de tres décadas de trayectoria, los creadores de “La cerveza y el dolor” eligieron el Palacio de los Deportes como sede del gran festejo. Prometen una fiesta inolvidable, con invitados especiales, y adelantan que La Mosca abrirá el concierto. Además, cantarán en vivo la canción que hicieron juntos. “Cada peso invertido valdrá la pena. Estaremos dando todo, además de obsequios especiales”, señalaron.

Tras 32 años de caminar a ninguna parte, Los Estrambóticos aseguran seguir siendo los mismos jóvenes extravagantes de los noventa que componían sobre tortillas, el metro, la tecnología, personajes urbanos y canciones que conectan con el corazón. “Somos simples, y ese brillo viene desde dentro. Si en un mundo paralelo viéramos a esos jóvenes que empezaban esta banda, les diríamos: sigan como van, no pierdan la autenticidad y disfruten cada momento”.