De acuerdo con la queja presentada por militantes, ambos funcionarios habrían utilizado su influencia política y sus cargos para incidir en los resultados, lo que generó inconformidad entre la base morenista local.

Testigos señalaron que durante la jornada interna se registraron empujones, confrontaciones verbales y presiones a simpatizantes, lo que derivó en la intervención de representantes del partido.

Por su parte, Violeta Yedid Palma Mendoza, presidenta del DIF, ha sido criticada por la falta de programas sociales efectivos, en especial en áreas de alimentación, atención a mujeres y apoyo a adultos mayores. Vecinos denuncian que los apoyos se entregan de forma discrecional o con fines de control político, dejando de lado a sectores altamente vulnerables.

El caso refleja las divisiones internas en Morena en el oriente del Estado de México (EMX), donde los procesos de reorganización territorial han estado marcados por pugnas de poder entre grupos locales.

Organizaciones sociales de Tlalmanalco han exigido que la dirigencia estatal investigue a fondo y que, de comprobarse las acusaciones, se apliquen sanciones para evitar que los cargos públicos sean utilizados como herramienta de intimidación política y beneficio personal.