TOLUCA, Edomex., 16 de junio de 2025.– Reconocer el arte, la historia y el esfuerzo detrás de cada pieza hecha a mano es fundamental para conservar el patrimonio cultural del Estado de México (Edomex). Por ello, el Instituto de Investigación y Fomento de las Artesanías de la demarcación (IIFAEM) impulsa la cultura del precio justo como una forma de valorar el trabajo de más de 53 mil artesanas y artesanos que hacen de esta actividad su modo de vida.

Precio justo: más que una cifra, un acto de respeto cultural

El IIFAEM hace un llamado contundente a la ciudadanía para evitar el regateo, una práctica que perjudica directamente a los creadores de arte popular. Al intentar pagar menos, se desvaloriza el tiempo, la habilidad y los recursos invertidos en cada pieza, lo que pone en riesgo la sostenibilidad económica de miles de familias.

Además, fomentar el precio justo contribuye a conservar los saberes tradicionales, permitiendo que las nuevas generaciones encuentren en la artesanía una oportunidad viable para su futuro.

¿Dónde comprar artesanías con precio justo en el Edoméx?

Para apoyar directamente a las y los creadores mexiquenses, el IIFAEM pone a disposición del público las Tiendas Casart, espacios especializados donde se comercializan productos auténticos con precios establecidos de manera equitativa y transparente.

Casart matriz – Paseo Tollocan Núm. 700, esquina con avenida Urawa, Col. Izcalli Ipiem, Toluca

  • Lunes a viernes: 10 a 19 horas

  • Sábado: 10 a 18 horas

  • Domingo: 10 a 15 horas


Casart en Parque de la Ciencia Fundadores – avenida Sebastián Lerdo de Tejada 103, Centro, Toluca

  • Martes a domingo: 10 a 18 horas


En estas tiendas se puede encontrar desde ropa tradicional, artículos de decoración, gastronomía artesanal, hasta objetos contemporáneos que mezclan tradición con innovación.

Consumir con conciencia: el impacto del precio justo

Pagar el precio justo por una artesanía no solo significa llevarse a casa un objeto bello y único, sino también ser parte activa en la preservación de las culturas originarias del Estado de México.

Este tipo de consumo consciente fortalece la economía creativa y reduce las prácticas que dañan la cadena de valor artesanal, como el regateo o la venta de imitaciones industriales que no respetan los procesos tradicionales.

Conclusión: valorar el arte hecho con el alma

Cada vez que se paga el precio justo por una artesanía, se respalda una historia, una familia, una comunidad y una forma de vida. El llamado del IIFAEM no es solo a consumir, sino a valorar y dignificar el trabajo de quienes hacen del arte su forma de expresión y sustento.