Balazos en el pie
En todas las oficinas hay chismes, ¿quién no lo ha vivido?, y aunque es una práctica inherente a ciertas personas, no por eso deja de ser molesto para la mayoría.
Para reflexionar sobre lo anterior, es importante comenzar por saber que la convivencia con los otros es un verdadero arte, mantener buenas relaciones con los demás es cuestión de aprender a tomar en cuenta muchos factores y llevarlos a la práctica.
Pero iniciemos con la descripción de algunos tipos de chismes y chismosos y qué hacer en estos casos. Y en cuestión de chismes de oficina, los hay de todos los temas y sobre todos los integrantes, desde el menos inofensivo hasta el que puede, incluso, llegar a poner en riesgo la reputación y trabajo de alguno de los compañeros. Qué tal cuando el chisme es sobre los sueldos, periodos vacacionales, etcétera. Es decir, son chismes sobre asuntos de interés general, que si bien no estamos seguros de que sean ciertos, prestamos atención, pero podemos decir que esos son los cotidianos y que no pueden faltar, ya que de alguna manera son como la antesala de las noticias que están sucediendo en el ambiente laboral.
También los hay relacionados con asuntos que no son de la oficina, esos son muy peligrosos, ya que pueden llegar a trascender más allá del territorio al que corresponden y generar conflictos que ponen en riesgo aspectos profesionales.
Existen otros chismes relacionados con la vida personal del o de los jefes, sobre todo cuando éstos tienen fama de Don Juanes, es el típico ¿sabes con quién anda ahora el jefe?, o bien algún otro compañero o compañera que gusta de las mismas prácticas y se convierten en el centro de atención, o en la oportunidad para obtener mejores posiciones dentro de la empresa.
También hay otros chismosos, que utilizan este recurso para conseguir un mejor puesto, de estos sí que debes cuidarte, son personas que al no tener suficiente confianza en sus habilidades, capacidad y preparación, se convierten en tejedores de historias en contra de su más fuerte contrincante, logrando algunas veces, sacarlo de la jugada.
Pero ¿qué hacer ante personas que gustan de generar chismes sobre los compañeros para no meterse en conflicto?, muy sencillo, lo más adecuado es poner freno a tiempo en el momento en que nos llega la información, en ocasiones es suficiente con un “no estoy enterado del suceso, por tanto no puedo opinar”, “no acostumbro hablar mal de los demás y menos de mis compañeros de trabajo”, siempre es importante establecer ante los demás la postura de respeto hacia ellos, de esta forma automáticamente colocas una línea de respeto hacia ti mismo, y te aseguro que casi nunca o nunca, te verás involucrado en un chisme de oficina.
Sin embargo, puede suceder lo peor, el centro del chisme eres tú, “pero si yo no me meto con nadie”, “yo sólo trabajo”, “cumplo con mis responsabilidades”, esas características justamente son las que a las personas inseguras y con baja autoestima les genera malestar, ya que todas las cualidades que observan en los demás, quisieran tenerlas, y al no lograrlo buscan la forma de descargar su frustración.
En estos casos, como en el anterior, también es importante poner fin al chisme lo más pronto posible, es necesario que la persona que lo está generando, sea confrontada y sepa que no se le tiene miedo, y de ser necesario pedirle al jefe que hable con él, es importante que tu jefe siempre sepa que tu postura es de respeto, profesionalismo y lealtad.
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