Pierde el control, arrolla peatones y choca en Toluca
MÉXICO, DF, 20 de septiembre de 2014.- Se calcula que 45 millones de mexicanos han sido víctimas de algún tipo de ciberataque y, tan sólo en 2013, las pérdidas económicas por estos delitos ascendieron a 39 mil millones de pesos.
Estos factores colocan al país en el tercer lugar de este renglón en América Latina, expuso Julio Alejandro Téllez Valdés, del Instituto de Investigaciones Jurídicas (IIJ) de la UNAM, al impartir la conferencia La ciberseguridad nacional.
Mediante un comunicado, la Máxima Casa de Estudios destacó que de los delitos virtuales detectados en nuestro territorio, más de la mitad se originó en Estados Unidos; una cuarta parte en Argelia; 4 por ciento en Francia y sólo el 0.09 aquí.
Los malwares más utilizados fueron los llamados droppers. Entre los ciberataques más notorios están los registrados en octubre de 2012 a los sitios web de las secretarías de Hacienda y Crédito Público (SHCP) y del Trabajo y Previsión Social (STPS), así como a la Confederación Patronal de la República Mexicana, por parte del grupo de hackers Anonymous, en respuesta a la reforma laboral propuesta entonces.
Al respecto, el gobierno instrumentó acciones mediante el Plan Nacional de Desarrollo, como el Sistema Nacional de Inteligencia Civil y estructuras de interconexión de bases de datos nacionales, explicó en el marco del Segundo Encuentro Latinoamericano sobre Ciberseguridad: Delitos Cibernéticos e Informática Forense, realizado en el Aula Magna Jacinto Pallares, de la Facultad de Derecho (FD) de esta casa de estudios.
Para evitar ser una víctima más, Téllez Valdés sugirió instalar y actualizar programas antivirus, probar buscadores anónimos como DuckDuckGo o StartPage y borrar datos registrados en el navegador web como historial, formularios y cookies.
También en el documento se recomienda usar contraseñas seguras que intercalen números con letras mayúsculas y minúsculas, además de considerar plataformas de correo alternativas como CounterMail o NeoMailBox, encriptar los mensajes y no dejar escritos passwords en computadoras públicas.