Abandonan feto en baños públicos de El Oro
En la tasa de informalidad laboral, el INEGI reporta que de los 6 millones 963 mil personas del Estado de México que pertenecen a la PEA, 58.9 por ciento están en la “informalidad laboral”
TOLUCA, Edomex, 15 de mayo de 2015.- Un total de 373 mil 992 mexiquenses que representan al 5.1 por ciento de la Población Económicamente Activa (PEA) del Estado de México, están desempleados y pese a que han intentado colocarse en una fuente laboral que les permita tener un ingreso, no lo han conseguido, de acuerdo a la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE) que da cuenta del periodo enero-marzo de 2015.
De acuerdo al reporte difundido en las últimas horas por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), en el Estado de México la PEA asciende a 6 millones 963 mil 203 personas, de las cuales 5.1 por ciento está desocupada, es decir sin empleo; en tanto que 4.2 por ciento reportó que tiene una ocupación parcial, ambos indicadores representan el 9.3 por ciento.
En el reporte que da cuenta de las tasas de ocupación y desocupación referentes al primer trimestre del presente año, el INEGI también informa que por sus condiciones laborales, 953 mil 958 de los trabajadores se les puede encuadrar en el estatus de “condiciones críticas de ocupación”.
Parámetro oficial que reconoce las adversas condiciones laborales en las que se desarrolla casi un millón de mexiquenses, a partir de que reportaron haberse desempeñado menos de 35 horas a la semana “por razones ajenas a sus decisiones”.
En este estatus de “condición crítica de ocupación” también están los mexiquense que trabajan más de 35 horas semanales con ingresos mensuales inferiores al salario mínimo y las que laboran más de 48 horas semanales ganando hasta dos salarios mínimos.
En cuanto a la tasa de informalidad laboral, el INEGI reporta que de los 6 millones 963 mil personas del Estado de México que pertenecen a la PEA, 58.9 por ciento están en la “informalidad laboral”, lo que implica que en sus fuentes de trabajo se encuentran vulnerables porque el patrón o jefe no reconoce su estatus (no tiene contrato) laboral, no cuenta con seguridad social, trabajan por su cuenta, en el campo o ciudad (en un escenario de subsistencia).