Balazos en el pie
Las balas de un justiciero anónimo no sólo acabaron con la vida de cuatro sujetos que se dedicaban a asaltar a pasajeros de autobuses que circulan de Toluca a la Ciudad de México, sino también alcanzaron a hacer daño colateral a la maltrecha imagen del secretario de gobierno del Estado de México, José Manzur Quiroga, por su desafortunada declaración de prensa en el sentido de que ahora «es prioridad» capturar a este vengador mexiquense.
Con esa declaración también Manzur cavó su tumba política para ya no seguir en la carrera estatal para ser nominado por su partido político como candidato a la gubernatura del Estado de México en el 2017.
La lluvia de críticas contra Manzur en las redes sociales y en los medios de comunicación no pararon. Y es que ahora para el gobierno del Estado de México «es prioridad» capturar a una persona que usó un arma de fuego en contra de cuatro delincuentes, cuando es obligación del estado evitar los asaltos en el transporte público, para no tener escenas trágicas como las que ocurrieron la madrugada del 31 de agosto en la carretera México-Toluca.
¿Por qué Manzur no le dio «prioridad», de antemano, a la captura de esta banda delincuencial cuando asaltó a otros pasajeros, como se puede observar en videos que se difundieron?
¿O acaso el secretario de gobierno ignoraba que estos cuatro delincuentes habían asaltado a otro autobús de la línea de Los Pegassos en el tramo de la caseta El Dorado al municipio de Ixtlahuaca, en la autopista Toluca-Atlacomulco, apenas dos días antes?
Claro que no, José Manzur sabe de los constantes asaltos en el transporte público no sólo en el Valle de Toluca sino también en el Valle de México, donde las víctimas son inocentes pasajeros que quedan acribillados por las balas asesinas de los delincuentes.
José Manzur debe darle prioridad no a la captura del justiciero, sino a resolver los asesinatos de los pasajeros muertos en los transportes públicos y, además, escuchar el clamor de los mexiquenses que se mantienen abandonados por sus gobernantes ante esos asaltos.
A este reportero le enviaron el siguiente escrito: «quisiera pedir de su apoyo y asesoría de cómo hacer, estamos artos de la delincuencia sobre la carretera México-Texcoco desde Chapingo hasta Santa Martha… los delincuentes ya disparan para asustar, nadie hace nada».
Y la ciudadana que envió su escrito lamentaba que el pasado 23 de octubre, uno de sus amigos quedó muerto en una combi a la altura del municipio de Los Reyes La Paz, además de que ella había sido víctima de dos asaltos en el transporte público, así como su señora madre.
Entonces, ¿por qué el secretario general de gobierno no salió a decir y a pedir prioridad para capturar a los delincuentes que asesinaron a ese humilde pasajero cuyo cuerpo quedó en una camioneta de servicio público que circulaba sobre la carretera federal México-Texcoco?
¿O también por qué no se rasgó las vestiduras y le exigió al procurador Alejandro Gómez ir contra los asaltantes que mataron de un tiro a una mujer pasajera que viajaba junto con su hija en una camioneta de la ruta 85 que fue asaltada sobre la autopista México-Puebla, el pasado 11 de octubre?
Para Manzur y otros funcionarios del Estado de México, no es importante el asesinato de pasajeros tanto en el Valle de México como en el Valle de Toluca, ya que su prioridad es ir en busca y captura del vengador anónimo que no solo acabó con la vida de cuatro asaltantes, sino que puso en ridículo a la estructura de seguridad del gobierno mexiquense.
¿Acaso Manzur ya olvidó tanto las promesas del gobernador Eruviel Ávila Villegas con acabar con el asalto en el transporte público con su famoso Plan Tres Transporte Seguro?
Ese plan solo sirve para que políticos se tomen la foto como lo hizo el ahora ex secretario del Trabajo, Javier García Bejos, que durante un operativo de este plan en Nezahualcóyotl, se subió a tomar la foto en un autobús, pero en vez de recibir las gracias, recibió reclamos porque no funcionaban sus operativos para capturar a los asaltantes.
Además, el secretario general de gobierno ya olvidó el ofrecimiento de su jefe Eruviel de introducir policías encubiertos a los autobuses de pasajeros para detectar a las bandas de asaltantes.
Ese plan tampoco funcionó en la práctica, así que Manzur debe de cumplir esas prioridades, antes de ir a la captura de un vengador anónimo que tuvo la suerte de llevar un arma, defenderse de cuatro delincuentes y no terminar muerto en el autobús como ha ocurrido con otros pasajeros.
Durante los meses de noviembre y diciembre el asalto al transporte público aumentan por el «Buen fin» y la repartición de aguinaldos, entonces, veremos si José Manzur le da prioridad a proteger a los pasajeros y en general a los millones de mexiquenses que a diario salen con miedo por temor a ser víctimas de un asalto.
PARA EL ARCHIVO…
José Manzur debe de dejar de soñar con la silla estatal en el 2017 y ponerse a trabajar, ya que además, las encuestas no lo favorecen para ser nominado por su partido a la candidatura en el 2017.
Veamos: en la encuesta del Instituto de Opinión Pública, Manzur estaba hasta el fondo con apenas 7.2 puntos de preferencia electoral, abajo de todos los aspirantes del PRI, el más alto en la preferencia electoral es Alfredo del Mazo, con 36 puntos a favor durante el mes de septiembre.
Le sigue Carolina Monroy, pero apenas con 9.6 puntos de preferencia; Luis Videgaray con 11. 5; Ana Lilia Herrera, 9.8 y Carlos Iriarte con 6.7.