Desigualdad salarial afecta la economía en Edomex
Cristian G. García y Marco Antonio Lira Sánchez
El Estado de México ha vivido este miércoles un día de auténtica zozobra, de temor. Los actos vandálicos bajo el pretexto de protesta por el alza de las gasolinas, dejan como saldo centenas de negocios saqueados, vandalismo con agresión a personas y bienes -rayones a automóviles-, bloqueo de carreteras, de calles, de gasolineras. Los comercios en Toluca y diversos puntos de la entidad se auto decretaron toque de queda y cerraron sus establecimientos.
En Toluca, la capital mexiquense, desde el mediodía se registraron actos vandálicos. En zonas como Paseo Tollocan, Pino Suárez, Isidro Fabela, el centro de la ciudad, así como colonias como San Lorenzo, refaccionarias, tienditas y hasta negocios de comida decidieron suspender actividades.
Eso no evitó que decenas de centros comerciales fueran saqueados. Tienditas tampoco se salvaron. En grupos de 20 y 30 personas los supuestos manifestantes ingresaban por la fuerza a negocios y todo tipo de establecimientos para llevarse mercancía. En Aurrerá de San Dimas, así como en el de Zinacantepec, entre otros grupos de hombres encapuchados y armados irrumpieron en los establecimientos para amedrentar a los consumidores y saquear las tiendas.
En las redes sociales se encargaron de hacer que cundiera más el pánico, alarmas, avisos de vandalismo. “Gente que es bajada de sus automóviles y de camiones urbanos”, decían los mensajes.
A causa de ello y de que a no pocos les tocó ser testigos del vandalismo, miles de personas de las principales ciudades decidieron resguardarse en sus hogares. Más del 80 de negocios en la mayor parte de la territorio mexiquense decidieron suspender sus actividades.