Liberalización forma mercado de gasolina robusto y competitivo: Coldwell

CIUDAD DE MÉXICO, 13 de enero de 2017.- El secretario de Energía (Sener), Pedro Joaquín Coldwell, aseguró que con la liberalización del precio de las gasolinas y el diésel se está formando un mercado de gasolinas robusto y competitivo, en el que los consumidores tendrán opciones de marcas, calidades y servicios.

Así lo detalló durante su participación en la reunión de trabajo que sostuvo ante el Pleno de la Comisión Permanente del Congreso de la Unión, junto a otros funcionarios y titulares de órganos autónomos que fueron convocados por los legisladores para abordar el tema del llamado gasolinazo.

Joaquín Coldwell señaló que esta liberalización también tiene como fin mantener la estabilidad del suministro y la seguridad energética, al respecto destacó que en el marco de dicha reforma el Gobierno federal está implementando acciones concretas para el desarrollo y la modernización de la infraestructura de petrolíferos, “lo que permitirá fortalecer la seguridad energética del país.

“Con la política pública trazada México está en vías de incrementar su seguridad energética, ampliando el nivel de inventarios y creando un sistema diversificado y eficiente de almacenamiento y transporte de combustibles que permita el despliegue de múltiples suministradores, asimismo estamos formando un mercado de gasolinas robusto y competitivo”, apuntó.

Refirió que los cambios responden a que el modelo energético vigente es inviable por lo que no se podía mantener los precios artificiales; y explicó que el modelo por el que transitó México por varias décadas se volvió incosteable y empezó a generar rendimientos decrecientes, por lo que las medidas para crear el mercado de petrolíferos eran necesarias.

“Por años el precio de combustibles fue sostenido artificialmente, en perjuicio del desarrollo del sector, de las finanzas de Pemex y el bienestar de los consumidores, había que cambiar, por el bien del país no podíamos seguir igual”, advirtió.

Explicó los factores que han llevado a esta crisis que se vive actualmente en la materia, y reconoció que en los últimos 13 años el país incrementó aceleradamente el consumo de combustibles, sin embargo, también redujo la producción interna y se aumentaron las importaciones, pues actualmente México compra en el exterior el 53 por ciento de las gasolinas que se consume.

Indicó que por décadas Pemex tuvo que asumir toda la carga de suministrar el mercado de petrolíferos, pues realizaba todas las actividades de la cadena de valor, desde la exploración de hidrocarburos hasta el suministro, “lo que no compensaba los gastos de abastecer combustibles hasta los rincones más alejados del país”.

Por lo que insistió en que los recursos de Pemex ya son insuficientes para ser el único inversionista en la modernización y expansión de la capacidad de almacenamiento y transporte, “así como para seguir siendo el único suministrador ante las crecientes necesidades del país”.

El titular de la Sener refirió que la cara e ineficiente infraestructura para transportar petrolíferos, así como una red de ductos y terminales de almacenamiento que no ha crecido en años, son un asunto de seguridad energética del país, por lo que planteó la urgencia de modernizar el sector de petrolíferos y fomentar la competencia.

“La capacidad de almacenamiento y transporte de gasolina, turbosina y diésel se quedó atrás frente a la creciente demanda nacional, nos hemos rezagado. La red de ductos no ha crecido desde hace 17 años y las terminales de almacenamiento, desde hace 18 años”, asentó.

Advirtió que la insuficiente red de poliductos ha ocasionado que Pemex recurra a otros medios de transporte más costosos, como los autotanques que, dijo, se han convertido en el segundo medio más utilizado para abastecer a las terminales de almacenamiento y reparto; sin embargo, es más costoso que los ductos.

“Transportar combustibles por autotanques es 14 veces más caro que por ductos, el uso del autotanque se ha impuesto sobre otros medios de transporte más seguros, eficientes y económicos como el ferrocarril, pues en México sólo el seis por ciento de los combustibles se mueven por esta vía”, precisó.

El funcionario federal afirmó que lo que ha ocurrido en los últimos cuatro años, justo los de la actual administración, es un cambio de paradigma luego de que por décadas se trató de sostener un modelo energético de manera artificial, por lo que había de cambiar.

“Una reforma energética del siglo 21, ningún país puede ofrecer congelar o bajar los precios de gasolina si no va con las tendencias del mercado; sería regresivo desde el punto de vista ambiental, desde el punto de vista social, desde el punto de vista hacendario y desde el punto de vista energético”, puntualizó.