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TOLUCA, Edomex., 21 de agosto de 2018.- Ser un punto de reunión y convivencia para las familias toluqueñas, fue lo que llevó al señor Noé Vergara a abrir un merendero en el centro de la capital mexiquense, mismo que se convirtió en un establecimiento tradicional de la ciudad, Chocolatería La Gloria, casa alameda, que celebra su 25 aniversario.
Fue el 20 de agosto de 1993, cuando La Gloria abrió sus puertas, Laura Montenegro, gerente general e hija del fundador, recuerda que sus padres decidieron dedicarse a su cuidado y al de sus dos hermanos e iniciar un negocio, “dijo, aquí no hay un merendero donde la gente se reúna y platique al final del día, y aunque para mi mamá fue como una idea lunática, poco a poco se dio cuenta que sí iba funcionando”, contó.
El pan recién salido del horno, comenzó a atraer a la gente, en días de lluvia o frío buscaban el calor, el horno; el cual pronto se convirtió en un atractivo para los comensales, asimismo, Laura señaló que en un principio el lugar cerraba a las 9 de la noche, pero la demanda los llevó a ampliar horario hasta las 23:00 horas.
“Nos fuimos acoplando como familia, nosotros atendíamos mesas, mi hermano los trastes; era muy familiar, la gente que empezó a trabajar con nosotros lo veían también como algo de ellos”, relató.
El amor al preparar la comida es el principal ingrediente, “eso es esencial, esa fue mucha la idea de mis papás, el inyectarle amor”, destacó. Así como la original que el señor Noé puso al nombrar los platillos, como la regañada, el sermón, la indulgencia, típicos del lugar con el mollete con nata, “que es una media concha con nata, que es como si fueran nubes y al comerla te sientes en la gloria”, expresó.
A pesar de que el establecimiento tiene como lema “La Gloria desde 1876”, explicó que es en remembranza a su abuela, quien tenía un pequeño horno y preparaba chocolate con molinillo, “entonces él creció con eso, mi abuelita también le inculcó el reunirse en familia, el saber qué le pasó a cada quien en el día… mi papá ya falleció pero nos dejó mucho legado”, dijo.
Por ello, para Laura es una responsabilidad mantener la esencia de La Gloria, pues aunque dice es triste ver cuando llegan familias y todos están con el celular, buscan hacer conciencia, asimismo, dijo que junto con su madre y hermanos quieren mantener la infraestructura, ya que alberga historias, recuerdos de muchas personas, “nosotros preferimos ayudar y contribuir a conservarlos”.
“Mi papá decía, hija esto no lo dejes caer, va a crecer y bueno, él ya no lo vio pero así es, seguimos creciendo, con ampliaciones, en los servicios, ya estamos con Uber Eats, abriendo más sucursales, como casa Metepec”, señaló.