Presentan primera etapa de plan de saneamiento del Río Lerma
TOLUCA, Edomex., 22 de julio de 2024 – Como parte del proceso de cuidado de las personas que acceden a los beneficios de los Tribunales de Tratamiento de las Adicciones (TTA) del Poder Judicial del Estado de México, en una de las últimas etapas se realiza un examen antidopaje para verificar que no están consumiendo ninguna sustancia nociva.
De acuerdo con el juez de control y tribunal de enjuiciamiento especializado en adicciones del Poder Judicial del Estado de México, Edgar Garay Vilchis, en los 10 años de trabajo de estos tribunales, 554 personas que habían cometido algún hecho delictivo por adicción se han inscrito para ser apoyadas en el proceso para superar su adicción, de las cuales 352 se graduaron, lo que representa más del 63% de efectividad.
Este programa es completamente voluntario, pues nadie puede ser ingresado en contra de su voluntad; los participantes deben asumir el compromiso de luchar contra su adicción además de atender su proceso judicial.
En las etapas de este programa se busca rehabilitar a la persona en el consumo de sustancias psicoactivas y en su contexto social, a través de estudios, intervenciones integrales y supervisión judicial.
«Un juez, de manera personal, a través de audiencias periódicas, verifica que cumplan con no consumir este tipo de sustancias», explicó Garay Vilchis.
En la parte final de este proceso, se les realiza un examen antidopaje para tener certeza de que no están mintiendo a la autoridad al decir que han dejado de consumir.
«Se realiza un monitoreo constante para saber si efectivamente están dejando de consumir, a través del psicólogo que lleva el tratamiento, de la percepción que tiene, pero sobre todo con pruebas científicas que son las pruebas de control de sustancias o antidopaje. Incluso son pruebas periciales», agregó.
Lo que se busca en estas personas que acceden a los beneficios de los TTA es que no reincidan en el delito por su adicción.
«Para que no sean un factor de riesgo para cometer algún delito… No es lo mismo una persona que, porque es su cumpleaños, se pone la fiesta del siglo y comete un delito, pero no tiene una adicción, necesita consejería, que una persona que usa drogas de manera constante y problemática y lo lleva a ser un factor de riesgo», expuso.
Las personas que se gradúan deben cumplir con el plan de tratamiento terapéutico, así como con el plan de intervención de actividades de reinserción social, estudiar y trabajar en un lugar determinado con una actividad lícita.