
Actúa ya: el Estado de México lidera en muertes por impacto de rayo
TOLUCA, Edomex., 05 de junio de 2025.- Cada 5 de junio, se conmemora el Día Mundial del Medio Ambiente, una jornada que busca crear conciencia sobre los efectos de nuestras acciones en la Tierra. En el Estado de México, esta fecha representa una oportunidad para reforzar el compromiso ambiental y preguntarnos seriamente: ¿estamos haciendo lo suficiente por el medio ambiente?
El Gobierno del Estado de México ha reiterado su intención de implementar políticas sostenibles y crear conciencia entre sus habitantes. Sin embargo, los retos siguen siendo enormes: más de 400 millones de toneladas de plástico se producen al año a nivel mundial, y menos del 10 por ciento se recicla, lo que sigue generando un impacto directo en la biodiversidad, la salud y la calidad de vida de los mexiquenses.
A través de campañas de concientización como #DíaMundialDelMedioAmbiente, la entidad busca inspirar a ciudadanos, empresas y autoridades a repensar sus hábitos y acciones diarias.
En los últimos años, los residuos plásticos han invadido ríos, lagos y sistemas acuáticos en el Edomex y en todo el país. Cada año llegan a nuestros ecosistemas acuáticos 11 millones de toneladas de residuos plásticos, que afectan directamente a la fauna, la flora e incluso a los seres humanos.
Además, los microplásticos han invadido el aire, el agua y los alimentos, convirtiéndose en un problema de salud pública que el Estado de México debe enfrentar con urgencia.
La respuesta requiere autocrítica y acción. Tanto en el Edomex como a nivel mundial, el cuidado del medio ambiente no debe quedarse en discursos, sino transformarse en decisiones concretas: separación de residuos, disminución del consumo de plásticos, uso de transporte sustentable y exigencia de políticas ambientales reales.
Por ello, este 5 de junio, el llamado es claro: todos somos responsables del futuro del planeta, desde las autoridades hasta los ciudadanos de a pie.
El Día Mundial del Medio Ambiente no es solo una conmemoración simbólica. Es un recordatorio de que el planeta necesita acciones, no promesas. Y en el Estado de México, donde el crecimiento urbano y el consumo aumentan a diario, es urgente preguntarse: ¿estamos haciendo lo suficiente por el medio ambiente?