
Trump y el nativismo (4ª parte)
Esta semana se cumple la mitad del mes de junio y prácticamente estamos a unas semanas de la mitad de este 2025; también estaremos a seis meses del inicio de gobierno de las nuevas administraciones municipales. Y, salvo las grandes obras que anuncia el Gobierno del Estado y algunos gobiernos de municipios llamados grandes, no se escucha mucho de las nuevas administraciones.
En los Planes de Desarrollo Municipal y programas de obra de todos los municipios, particularmente de los considerados “grandes”, se considera la realización y construcción de rehabilitaciones viales -bacheo básicamente-, embellecimiento y rescate de espacios públicos, obras de acceso urbano, obras para la introducción de agua potable o alumbrado público. Entre esos municipios están Ecatepec, Nezahualcóyotl, Texcoco, Toluca, Coacalco, Naucalpan, Cuautitlán Izcalli, Cuautitlán México, Nicolás Romero y Tlalnepantla.
Sin embargo, a casi seis meses de haber iniciado, no hay nada; salvo una que otra excepción.
En este año 2025, los 125 municipios recibirán un total de 7 mil 769 millones de pesos del Fondo FAISMUN (Fondo para la Infraestructura Social Municipal). Además, la Secretaría de Desarrollo Urbano del Estado proyecta más de 600 obras estatales distribuidas entre los municipios, con énfasis en bacheo y rehabilitación vial. Pero, ¿Y lo recaudado por los municipios en estos primeros dos trimestres del año? ¿Dónde está?
Mientras se presume inversión estatal y federal como si fueran milagros bajados del cielo, nadie habla de la recaudación propia, esa que pagamos puntualmente cada enero con más fe que certeza: el predial, el agua, los derechos, los aprovechamientos, y hasta la multa por estacionarse.
En el primer trimestre de 2025, los 125 municipios recibieron más de 11 mil millones en participaciones federales, pero lo más divertido es que de la recaudación municipal directa no se sabe nada. Nada. Así que ese presupuesto federal es como darle domingo al hijo que nunca recoge su cuarto.
Bueno, salvo uno que otro municipio que presume que cobró “el 76 % del predial”, pero lo curioso es que no se informa sobre qué se hace con ese dinero.
Y uno se pregunta: ¿si el FAISMUN y otros Fondos federales y estatales pagan obras, y encima los ciudadanos cumplen con sus impuestos… entonces, por qué hay municipios donde no se ve ni una banqueta pintada?
El silencio sobre la recaudación local es tan ensordecedor como los cláxones en un semáforo sin mantenimiento de los que hay muchos en esos municipios “grandes”. Porque si algo distingue a muchos gobiernos locales es su habilidad para ocultar con cifras lo que no pueden justificar con resultados.
Según la Secretaría de Finanzas del Estado de México, durante este primer semestre, en muchos de los municipios en promedio más del 60 % del ingreso municipal proviene de recursos propios, como el predial, el pago por agua potable y diversos derechos.
Sin embargo, de esos ingresos no hay informes públicos consolidados al primer semestre de 2025. Ni en portales de transparencia (bueno, en aquellos donde existe), ni en boletines oficiales, ni en redes sociales.
A pesar de que en enero y febrero cada municipio lanza campañas como “Paga tu predial y gana un autooo”, una vez recaudado el dinero, el misterio comienza. ¿Cuánto se recaudó? ¿En qué se gastó? ¿Cuántas luminarias se compraron con ese dinero? ¿Cuántos baches?
Así que la próxima vez que vea un alcalde tomarse una foto en una calle recién pavimentada, no olvide preguntarse, con tono irónico y tribuna ciudadana:
¿Y el dinero, apá?