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TOLUCA, Edomex., 21 de agosto de 2025.- En un momento en que la depresión, la ansiedad y la fatiga emocional afectan a un gran número de personas, la experta en nutrición, directora y fundadora de Bienesta Medical Center, Nathaly Marcus, explica que la relación entre los alimentos y el bienestar mental es un tema cada vez más relevante para la ciencia.
Recientes estudios de prestigiosas universidades como Warwick, Harvard y Columbia, así como de la Revista Británica de Psiquiatría, revelan un fuerte vínculo entre ciertos alimentos y el riesgo de padecer depresión.
De acuerdo con las investigaciones presentadas por Nathaly Marcus, una dieta basada en alimentos procesados puede ser particularmente dañina, ya que estos contienen sustancias químicas nocivas que favorecen la inflamación y aumentan el riesgo de enfermedades, incluyendo las que afectan el estado de ánimo, por ejemplo:
El cerebro es un órgano extraordinariamente sensible que requiere una nutrición específica. La producción de neurotransmisores como la dopamina -relacionada con la motivación- y la serotonina -responsable de la calma y el buen humor-, depende directamente de los nutrientes que se obtienen de los alimentos.
Por lo tanto, un simple cambio de hábitos puede marcar la diferencia, ya que aumentar el consumo de frutas y verduras no solo mejora la salud física, sino que incrementa los niveles de felicidad y satisfacción.
En la más reciente Encuesta Nacional de Salud y Nutrición (ENSANUT) realizada en 2022, se encontró que en la región centro de nuestro país, que incluye a la Ciudad de México y al Estado de México (EMX), el 19.3 por ciento de los adolescentes y el 21.9 por ciento de los adultos presentan sintomatología depresiva y conductas alimentarias de riesgo, como la bulimia o la anorexia.
Estos datos revelan una preocupante realidad para el centro del país, donde la depresión y los trastornos alimentarios afectan a una porción significativa de la población. Las estadísticas obligan a reevaluar la relación con la comida y reconocer que cada elección alimentaria, tiene un impacto directo en la salud física y mental. No se trata solo de nutrición, sino de una nueva perspectiva de autocuidado que podría ser clave para el bienestar emocional de miles de mexicanos.