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TOLUCA, Edomex, 3 de junio de 2015.- Gemma Wale, una joven británica de 23 años ha sido condenada a dos semanas de prisión por un motivo, cuanto menos, curioso: mantener relaciones sexuales demasiado ruidosas.
Sus vecinos, del barrio de Small Heath en Birmingham, han asegurado que era «la vecina del infierno». Al parecer, tales eran las molestias que Wale causaba a sus vecino que no dudaron en ir a quejarse al ayuntamiento, e incluso interponer una denuncia.
Según han comentado en el diario Mirror sus vecinos, los ruidos que emitía Wale cuando estaba en la cama eran increíblemente fuertes. Tanto que los escuchaba todo el vecindario. Uno de ellos ha explicado que una noche llegó a gritar tan fuerte que despertó a toda su familia. Ha explicado también que ya estaba harto de escucharla tener sexo, y sus hijos también, «pero solía encender la televisión cuando ocurría».
Otra vecina afectada por los ruidos de Gemma Wale asegura que no quiere «volver a verla nunca» porque es una «vecina del infierno».
Como Wale, que tiene dos hijos, no se presentó a declarar ante el juez, ha sido condenada a pasar dos semanas encerrada en prisión, por la «falta de remordimiento por su comportamiento».
Vía QUÉ!