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MÉXICO, DF, 31 de octubre de 2014.- La delegación mexicana fue abanderada en la Residencia Oficial de Los Pinos por Enrique Peña Nieto, como representantes en los XXII Juegos Centroamericanos y del Caribe (JCC) de Veracruz, que se inauguran el próximo 14 de noviembre.
Al son del Himno Nacional y ante un ambiente por demás patriótico, el Presidente de la República Enrique Peña Nieto deseó lo mejor para este grupo de atletas que lucharán por poner el nombre del país en lo más alto.
El presidente del Comité Olímpico Mexicano, Carlos Padilla Becerra, fue el primero en tomar la palabra. «Estos juegos confirmarán que México es reconocido como un gran país», dijo.
«Nuestra delegación es el equilibrio entre juventud y experiencia», continuó Carlos Padilla, quien también advirtió que «en tiempos difíciles el deporte es el lazo de esperanza».
Emilio Chuayffet, secretario de Educación Pública, coincidió en que «el deporte es quien nos hace conocernos a nosotros mismos más profundamente. El deporte nos vuelve una escuela donde aprendemos la importancia de la libertad y del esfuerzo».
El secretario se dirigió a los atletas y sus entrenadores, a quienes felicitó por ser ejemplo y les recordó que «el camino para ser mejores está en la superación personal».
El atleta Juan René Serrano se dijo honrado por hablar por sus compañeros deportistas. «Nos hemos preparado como nunca, en las mejores condiciones», agradeció al presidente Enrique Peña Nieto.
Juan René, quien también forma parte del Estado Mayor Presidencial, compartió con sus compañeros que «todos esos días de lágrimas, sudor y cansancio quedarán atrás cuando veamos izada en lo más alto nuestra bandera ¡Que viva México, campeones!», concluyó.
“Es tiempo de salir a ganar y es que estoy seguro que todos ustedes (los deportistas) están listos para triunfar. A partir del 14 de noviembre nuestros atletas se verán reforzados por miles de aficionados mexicanos que los acompañaremos por las 26 sedes», señaló Peña Nieto, quien concluyó su mensaje diciendo que «los éxitos no son cuestión de suerte sino de disciplina. Compitan con inteligencia pero lo más importante con pasión y con todo el corazón».
Así llegó el momento esperado, el abanderamiento de la delegación mexicana con Paola Longoria al frente: «Estoy seguro que con pasión y corazón pondrán el nombre de México en alto», dijo Peña Nieto antes de confiarles el lábaro patrio y la esperanza de millones de mexicanos.