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TEXCOCO, Edomex., 26 de marzo de 2015.- El hijo del “Faraón de Texcoco”, Silverio Pérez Gutiérrez, fue acusado ante la PGJEM de despojar a Carmen Arana Gonzálezde de las escrituras de su terreno y no pagarle más de 2 millones de pesos por el predio, a pesar de haber dado su palabra por ser hijo del famoso torero.
En la agencia del Ministerio Público de Texcoco quedó radicada la denuncia en la carpeta 3221803602339524 que se inició en septiembre del 2014, a petición de la señora Carmen, de 61 años de edad.
La queja fue en contra de Silverio Pérez Domínguez, hijo de Silverio Pérez Gutiérrez, el famoso matador de toros que trascendió a nivel mundial.
En el delito presuntamente también participó su hijo Roberto Pérez Carbonell, cuyo nombre también se incluye en la carpeta de investigación.
La señora María del Carmen Arana acudió a las medios informativos porque teme ser despojada del único patrimonio que le queda, ya que sus negocios quebraron por falta de inversión.
La también viuda explicó que en agosto del 2014 puso a la venta un terreno de mil 870 metros cuadrados, y Silverio Pérez Domínguez acudió a ver el terrenos señalando que le interesaban, pero que también quería que le avisara al delegado del pueblo de San Simón que le facilitara por lo menos siete tomas de agua.
Cuando acudió con el delegado, el hijo de Silverio Pérez Gutiérrez, Roberto Pérez Carbonel, sólo ofreció 10 mil pesos por la siete tomas de agua, lo que rechazó el delegado.
A pesar de este problema, la señora Carmen Arana fue citada a las oficinas de Silverio Pérez Domínguez en la ciudad de Texcoco para que firmara un contrato en el cual el comprador puso una dirección de Puerto Vallarta y se identificó con una credencial de 1991.
El comprador le pidió que le mostrara las escrituras para que las revisaran sus abogados, aunque la señora María del Carmen pidió que era mejor ver a un notario, pero Silverio Pérez Domínguez le dijo que él tenía a sus abogados, lo que les permitiría tener un “ahorro» en ese tipo de trámites.
Ante ello, Carmen Arana acudió con sus documentos originales para que las revisara el abogado que, «con el pretexto de que ya iba, se las llevó con el compromiso de entregarse al otro día».
«Yo le dije que eso no era así, que me hiciera un recibo por las escrituras, pero Silverio Pérez Domínguez me dijo que no desconfiara, que al otro día me las iba a entregar», dijo la mujer, recordando que cuando el abogado salía el hijo del “Faraón de Texcoco” le señaló al abogado que el terreno quedaría a nombre de su hijo Alberto.
Pero al otro día y durante la semana, la señora acudió a la oficina para solicitar la devolución de las escrituras o un recibo por las mismas, pero no encontró a Silverio Pérez Domínguez y su secretaria dijo que él vivía en Puerto Vallarta y no regresaría pronto.
Tiempo después, cuando al fin logró ubicar al Silverio Pérez Domínguez, éste le dijo que le iba a comprar el terreno y que le dabría un cheque por 50 mil pesos para que tuviera la certeza de que le pagaría el predio.
Carmen Arana, señaló que estuvo acudiendo en varias ocasiones a la oficina del comprador pero ya no le regresaron sus escrituras ni le dieron dinero, por lo que acudió a un abogado que en septiembre del 2014 interpuso una denuncia de hechos que quedó registrada en la carpeta 322180360239524.
Posteriormente, el abogado Vladimir Cayo Quintero, a nombre de Silverio Pérez hijo, acudió al Ministerio Público a regresar las escrituras pero se negó a entregar la firma del contrato de compra-venta que tenía el comprador, ya que entregó sólo 50 mil pesos y no el resto del dinero.
«Yo sólo pido que me devuelvan la documentación completa y que me devuelva mi firma para que no haya penalización de incumplimiento del contrato», dijo la mujer.
Señaló que después del 20 de abril tiene otra audiencia y por ahora se mantiene en la incertidumbre y con el temor de que la despojen de su terreno.
«Ofrecí en venta mi terreno porque tengo necesidad de dinero en efectivo, no tengo recursos para sostenerme, tengo deudas hasta con la señora de la fonda en donde como, pero ahora temo ser despojada de mi único patrimonio», dijo Carmen Arana.
Finalmente, explicó que ella confió en Silverio Pérez Domínguez porque siempre se mostró como una persona correcta e intachable, además consideró que no mancharía el buen nombre de su padre Silverio Pérez Gutiérrez, quien además de torero en tres ocasiones fue presidente municipal de Texcoco y en estas fechas se cumplen 100 años de su natalicio.