Balazos en el pie
Esta mañana me enteré de una situación que, lejos de darme alegría, me puso a pensar, y mucho, sobre el futuro de este país.
Y es que llegó a mis oídos la noticia de que una mujer a la que vi crecer será madre por segunda ocasión; cualquiera me dirá que no hay vuelta de hoja, eso sin duda es para ponerse alegre y se los justifico.
Lo que me hizo pensar es que al preguntarle a esta conocida de nuestra familia sobre qué iba a hacer al encontrarse ella desempleada, separada del padre de sus hijos, con 16 años que tiene la joven en cuestión, me comentó que para eso estaba el gobierno, que ya le habían dicho que en cuanto nazca el producto lo inscriba a un programa de asistencia social, pues cumple con todos los requisitos.
Es menor de edad, con lo cual tendrá derecho al programa de madres adolescentes; es separada, o mejor dicho abandonada del sujeto que la embarazó, por lo que entra al programa de madres solteras; no tiene empleo, por lo que tiene cabida en el programa de oportunidades y así le podemos ir descubriendo “atributos” a esta joven mujer para que sea apoyada por los gobiernos en sus diferentes niveles, estatal, federal o el municipal de Toluca.
Pero al indagar un poco más me entero que esta familia ha forjado del gobierno su modus de vida; el padre es discapacitado, por lo que también entra a algún programa del gobierno donde recibe de manera religiosa el apoyo económico que presta el gobierno a “los más necesitados”.
Y para acabar de propiciar mi coraje, me entero que la persona que nos ayuda en el aseo domestico de mi hogar, tiene una dupla de nueras que también han visto en los programas del gobierno federal y los locales una forma más que reconfortante de vivir sin hacer nada.
Ellas, a pesar de estar casadas con los hijos esta mujer (que por cierto no recibe ninguna ayuda gubernamental a pesar de su edad) se han declarado en plena soltería o abandono de sus parejas para entrar al programa de madres solteras, además se han declarado como pobres en situación extrema, recibiendo también el programa oportunidades, o sea… la manutención llega por partida doble, sus maridos y el gobierno, o mejor dicho todos nosotros que sí pagamos impuestos.
Por ello, hoy levanto mi voz y le digo al presidente de la República, Enrique Peña Nieto, al gobernador Eruviel Ávila Villegas y a la alcaldesa de la capital mexiquense, Martha Hilda González Calderón, que si no corrigen sus filtros para seguir dando apoyos gubernamentales, si le van a seguir dando dinero de nuestros impuestos a personas tan holgazanas como los dos casos que he platicado, si voy a tener que seguir manteniendo sin mi permiso a esta bola de parásitos, me tendré que declarar en huelga de pago de impuestos.
Si quieren apoyar a los jóvenes ahí están los cerillos de los centros comerciales, creo que el 100 por ciento de ellos tiene que estudiar para que puedan estar trabajando ahí, también están los niños que después de la escuela se colocan en los cruceros tratando de vender algo para apoyar a la familia, si quieren apoyar a las madres solteras ahí hay cientos de ideas para emprender, si quieren apoyar a los discapacitados fomenten empresas incluyentes.
Ya dejemos de darles dinero a estas personas que lo único que saben hacer es parir hijos o estirar la mano, a estas personas que sin el menor recato mienten y engañan para lograr sus apoyos, dejemos de sangrar a los que hoy y siempre hemos pagado impuestos.
Reitero, o dejan de hacerlo o me tendré que declarar en mora de pago de impuestos… ya me cansé de escuchar que lo que han logrado es un verdadero ejercito de sanguijuelas que sólo saben sacarnos el dinero sin aportar nada a esta sociedad que se quiere Mover en Grande en un estado educador.