Amenaza de ataques a escuelas provoca miedo a vecinos de Acolman

ACOLMAN, Edomex., 27 de noviembre de 2014.- Vecinos de las comunidades de Tepexpan, Cuanalán y Xometla, retiraron a sus hijos de las escuelas ante una supuesta amenaza de ataque a planteles educativos.

Lo anterior debido al rumor de que integrantes de la banda denominada “Los Pelones” atacarían las escuelas por represalias, luego del linchamiento de uno de sus integrantes ocurrido el pasado lunes en la comunidad de Cuanalán.

Aunado a lo anterior, padres de familia decidieron retirar a sus hijos de los planteles educativos, ante dicha versión que circuló por redes sociales.

Desde temprano se veía gente corriendo en las comunidades de Cuanalán, Chipiltepec, San Lucas Tepango y Tepexpan, así como en las comunidades de Atlatongo y San Lorenzo en el municipio de Teotihuacán, debido al miedo generado por el rumor.

Ante esta situación, autoridades municipales implementaron un operativo de vigilancia en coordinación con elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) y de las Bases de Operaciones Mixtas (BOM), para tranquilidad de la población; sin embargo, algunos comercios de la comunidad del centro de Tepexpan decidieron cerrar sus puertas.

En algunas escuelas, elementos de la Policía Municipal resguardaron los planteles, ante la exigencia de la población.

Mientras tanto, pobladores de la comunidad de Cuanalán, en donde el lunes se registraron hechos de violencia debido al asalto a un mototaxista, expresaron que en la región se registran a toda hora del día diversos asaltos, por lo que exigen mayor vigilancia.

Además, puntualizaron que en meses anteriores habían colocado mantas advirtiendo sobre la posibilidad de linchar a las personas que cometieran algún delito.

RUMOR GENERALIZADO EN LA REGIÓN PIRÁMIDES

Debido al rumor, escuelas de los municipios de Teotihuacán, San Martín de las Pirámides y Otumba, suspendieron clases ante el temor de que un grupo de encapuchados llegaran a los planteles a realizar mítines para exigir la aparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa, por lo que se temían destrozos.

Ante la alarma generalizada, algunos maestros ingresaron sus automóviles a los patios de las escuelas, ante el temor de que sufrieran daños. Además, se suspendieron las clases del turno vespertino.