Bitakoreando

Juan Gelman (1930-2014)

Hace tregua y vuelve a reconciliar el asombro

Es mayo, una lluvia intermitente acosa el emblemático Palacio de las Bellas Artes, recinto de la máxima expresión cultural del país. Su mármol gris y brillante cobija esta noche a los poetas Eduardo Lizalde, Hugo Gutiérrez Vega, Marco Antonio Campos y Eduardo Hurtado, los envuelve en su esplendor ante la ausencia de su amigo Juan Gelman: El poeta argentino autor de más de 20 libros de poesía y quien afortunadamente recibió en vida los premios y reconocimientos más merecidos, como el Premio de Literatura en Lengua Castellana “Miguel de Cervantes” 2007.

Esta noche están sus cuates, sus colegas, sus cercanísimos, evocando su dolorosa desaparición pero también su gran aportación a la Lengua Española.

El gran traductor y ensayista Marco Antonio Campos reflexiona sobre el escrito conmovedor de “Carta a mi madre” donde la poesía en castellano se siente “…en los primeros versos, que entran en la casa quebrada del corazón”, “ …en donde podría decirse que el estilo de Gelman no parece cuidado, pero cada palabra ha sido elegido”.

Por su parte Eduardo Hurtado quien hizo el compendio de la obra de Juan Gelman para el Fondo de Cultura Económica de España. Platico que conoció a Gelman al mismo tiempo que a su poesía; y que le toco leer a Juan, a quien “ siento muy vivo” .

Al tomar la palabra el poeta y académico Eduardo Lizalde con ceremoniosa voz lamenta la muerte de Juan Gelman quien dice “..estaba a punto de celebrar 25 años de vivir en México, donde decidió radicar desde 1989”. “Y nos quedamos con una obra extraordinaria con novedades para la lengua española, un estilo novedoso en la zaga intensa de Gelman; poeta de muchos registros y formas” y recordó lo que un día le dijo Juan: “entre tantos oficios que ejerzo, este que no es mío y que me obliga a trabajar con la palabra, con la ceniza”. Lizalde leyó un poema para quitar las caras tristes y mostrar el impresionante estilo de Gelman cuando estuvo anclado en París y habla con un ex caníbal, creando así una atmosfera de risas y confort.

Al terminar su participación dijo: “Llevará tiempo estudiar a fondo la obra de Juan Gelman, por ser variada y de múltiples registros y formas”.

En tanto la Sala Manuel M. Ponce abarrotada por jóvenes y otros no tanto se encontraban personalidades de la cultura María Cristina García Cepeda, directora general del Instituto Nacional de Bellas Artes (INBA), y Eduardo Vázquez, titular de la Secretaría de Cultura del Distrito Federal.

Afuera la lluvia seguía cayendo en la ciudad y entró la entrecortada voz del maestro, diplomático y poeta Hugo Gutiérrez Vega quien comenzó diciendo: “Atesoro en casa una fotografía en un homenaje a Juan, ahí leí un poema a su hijo, bueno quise leer porque el llanto no me dejó. Juan me tomó del brazo y unió su frente al mío y le dije, ¡carajo! pinche Juan, siempre me haces llorar. Y me di cuenta que el lloraba más, diciéndome que no estaba acostumbrado a llorar, hacer melodrama, pero luego acotó “y lo de pinche se lo vas a decir a tu abuela”, las risas volvieron al recinto.

Así con lágrimas al borde Hugo Gutiérrez Vega se internó en las palabras y poemas de Gelman “…Buscaba la luz y hacer un acuerdo de tregua con la historia., con su trabajo nos ayudó a reconciliar el asombro y la gloria de los alimentos del espíritu”, “…fue creando nuevas palabras, una nueva prosodia de metáforas como piedras preciosas que vienen del alma mineral”. En un ir y venir de la voz de Hugo seguía diciendo “Juan nos entregó una poética reflexiva, inventa palabras, crea sus reglas gramaticales. Ejerce el oficio de la poesía día y noche, obligado por el dolor del mundo por los dolores pero también por el encuentro con el beso”.

Con esa intensidad de reconocimiento a Juan Gelman, su amigo termina diciendo: “No temas Juan estés donde estés a los homenajes… ojalá decíamos todos este con la tía Adelaida quien lleva los negocios con dios hasta las brazas, ahora cantaremos contigo un buen tango”.

Y efectivamente el tango comenzó y la lluvia, afuera del palacio, paró.

Ciudad de México, 6 de mayo de 2014. Homenaje póstumo a Juan Gelman en el Palacio de Bellas Artes.