Despliegan Jornadas por la Paz en 32 municipios de Edomex con patrullajes
TLALMANALCO, Edomex. 5 de mayo de 2014.- Una banda de secuestradores que usaban una camioneta Van color blanca, para raptar a estudiantes, amas de casa, jubilados o profesores de municipios de la zona de los volcanes y llevados a una casa de seguridad en Pueblo Nuevo o a tiendas de campaña en el bosque, fue capturada por la policía federal.
Se les responsabilizan de 13 secuestros cometidos en Tlalmanalco, Chalco, Valle de Chalco, Amecameca y Ayapango, entre otros.
Los federales le dieron seguimiento al secuestro de una ama de casa y de un menor de edad, ocurrido en octubre de 2013, para lograr ubicar a este grupo delictivo que usaban una casa de seguridad en este municipio o llevaban a sus víctimas a la zona boscosa, donde las mantenían cautivas en tiendas de campañas.
Su base para cometer sus fechorías, la tenían en una domicilio ubicado en la colonia Pueblo Nuevo, donde el pasado martes 29 de abril, se observó que varios sujetos introducían a esa casa a una persona cubierta de la cabeza.
Se implementó un operativo con el que se logró, sin efectuar un solo disparo, la detención de ocho personas y la liberación de una víctima de 35 años de edad, de ocupación maestra de preescolar, secuestrada en el municipio de Cocotitlán.
A los detenidos se les vincula, por lo menos, con 13 casos de secuestro investigados por la Policía Federal, con un total de 18 víctimas.
Al realizar la investigación correspondiente, fue posible determinar la manera de operar de estos individuos, la cual consistía en interceptar a personas de las que conocían su rutina diaria. Lo anterior, lo llevaban a cabo de dos formas: una era habilitar una camioneta tipo Van, simulando una unidad de transporte público de pasajeros, sobre la ruta que habrían de abordar las víctimas, quienes al subir eran secuestradas.
La otra consistía en que al momento en que las víctimas se dirigían a sus lugares de trabajo o de estudio, eran interceptadas por la misma camioneta tipo Van de la que descendía un grupo de entre 4 a 6 personas con armas largas para someterlas.
Una vez que tenían sometidas a sus víctimas, eran conducidas a zonas boscosas de los municipios aledaños en donde las mantenían en cautiverio, en casas de campaña, o bien a la casa de seguridad en que operaban.
Estos sujetos abusaron sexualmente de varias víctimas, a quienes golpeaban constantemente, amenazando con privarlas de la vida en caso de que sus familiares no realizaran el pago con prontitud.
En al menos tres casos, secuestraron a mujeres junto con sus hijos, abusaban sexualmente de ellas y las dejaban en libertad para que reunieran dinero a cambio de la liberación de los menores.
Los detenidos, presuntos responsables de estos delitos, son: Amado “N”, de 38 años de edad, originario del Estado de México, a quien se le identifica como la cabeza de la organización delictiva. Elegía a las víctimas, además de realizar las llamadas de negociación con las familias y efectuar el cobro del rescate. Solía golpear y abusar sexualmente a las mujeres que secuestraban.
Armando “N”, de 30 años, originario del Distrito Federal. Realizaba, junto con Amado, las llamadas de negociación con las familias de las víctimas y era el responsable de las liberaciones.
Jesús “N”, de 37 años, originario del Estado de México. Se encargaba de interceptar a las víctimas, así como de vigilarlas y alimentarlas. De igual forma, las abusaba sexualmente.
Josué “N”, de 45 años, originario del Estado de México. Se encargaba de la intercepción y liberación de las víctimas, así como de proporcionar los vehículos que utilizaba la organización.
Aldo “N”, de 47 años, originario del Estado de México. Se encargaba de la intercepción, vigilancia y liberación de las víctimas, así como de proporcionar los vehículos que utilizaba la organización.
Marco “N”, de 47 años, originario del Estado de México. Se encargaba de proporcionar información de las posibles víctimas, así como de vigilarlas y alimentarlas durante su cautiverio.
Cinthya “N”, de 29 años, originaria del Distrito Federal. Interceptaba y vigilaba a las víctimas, además de participar en la liberación de las mismas.
Teresa “N”, de 37 años, originaria del Estado de México. Proporcionaba la casa de seguridad, así como la preparación de los alimentos para la organización y las víctimas.