Crece porcentaje de mujeres al frente de las economías familiares

TOLUCA, Edomex., 18 de enero de 2014.- Investigadores de la Universidad Autónoma del Estado de México aseguraron que en los recientes años creció en todo el mundo el porcentaje de mujeres al frente de las economías familiares, en la actualidad, al menos un tercio de las familias depende de las mujeres, quienes en circunstancias particulares asumen totalmente la responsabilidad del sustento familiar.

Los autores del trabajo de investigación “Mujer lechera. Rol femenino en los sistemas de producción lechera de pequeña escala en Aculco, Estado de México”, Mónica Elizama Ruiz Torres, Carlos Arriaga Jordán, Francisco Herrera Tapia y Francisco Ernesto Martínez Castañeda, agregaron que en el campo, este fenómeno conocido como feminización está muy presente.

Citaron cifras del Instituto Nacional de Estadística y Geografía referentes al primer trimestre de 2013, donde se refiere que en el país existen 57 millones 481 mil 307 mujeres, que representan 51.16 por ciento de la población; de ellas, ocho millones 340 mil 537 trabajan y en las zonas rurales son cada vez más las familias que tienen al frente de las actividades productivas una presencia femenina.

En su investigación, los especialistas del Instituto de Ciencias Agropecuarias y Rurales (ICAR) de la Máxima Casa de Estudios mexiquense llevaron a cabo una evaluación con 30 productores lecheros de dos delegaciones del municipio de Aculco: El Tixhiñú y La Concepción Ejido, que representan 14.70 por ciento de los productores de la región y cuya principal actividad económica es la producción de leche.

De acuerdo con los datos recabados, detallaron, se observó que 36.36 por ciento de los sistemas de producción de leche en pequeña escala analizados poseen jefatura femenina; ellas, puntualizaron, realizan más de 80 por ciento del trabajo requerido para que el sistema productivo funcione, a través de la limpia del corral, realización de dos ordeñas diarias, corte de pradera para dar de comer a los animales, supervisión del riego, toma de decisiones sobre compra-venta de vacas en producción y administración del dinero ganado por la venta de la leche, es decir, acciones consideradas socialmente como “masculinas”.

Los universitarios opinaron que la jefatura femenina en los sistemas de producción de leche de pequeña escala surge bajo condiciones sociales específicas, tales como migración, enfermedad y presencia de trabajos asalariados del marido.