Pierde el control, arrolla peatones y choca en Toluca
TOLUCA, Edomex., 29 de diciembre de 2014.- La Encuesta Nacional de Seguridad Pública Urbana del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), encontró que el 70 por ciento de los mexicanos dijeron sentirse inseguros, lo que ha ocasionado el crecimiento de empresas privadas de seguridad, pero cuyas actividades aún no están controladas.
Ricardo Mejía Berdeja, diputado secretario de la Comisión de Puntos Constitucionales, informó que en el 2008 alrededor del 80 por ciento de 10 mil compañías de seguridad privada operaba de manera informal a lo largo del país.
Asimismo, la mayoría de estas empresas estaba a cargo de ex militares o ex funcionarios de los cuerpos policiacos federales y estatales.
Sin embargo, aclaró que las firmas privadas “también pueden crear serios problemas, ya que al tener conocimiento de las familias, los negocios, las rutinas y las vulnerabilidades, se les confiere la oportunidad de extorsionar a sus empleadores”.
El legislador reconoció que si bien el mercado de la seguridad privada en México se ha valorado en 240 mil millones de pesos, también cuenta con puntos álgidos que dan cabida a suplantaciones de guardias o filtraciones de delincuentes.
Mencionó que de acuerdo con la Confederación Nacional de Empresarios de Seguridad Privada y Similares de los Servicios del Ramo (Conesprysir), hay entre 8 mil y 10 mil negocios de este tipo, tomando en cuenta los formales e informales, donde laboran un millón 50 mil guardias; de ellos, 600 mil pertenecen a compañías de las llamadas “patito”, lo cual representa un gran peligro para la propia seguridad del estado.
Por otro lado, indicó que el costo promedio de un guardia se ubica entre los 13 mil o 14 mil pesos mensuales, mientras que en la informalidad es de 6 mil.
De acuerdo con la Asociación Mexicana de Empresas de Seguridad Privada, 40 por ciento de estas empresas en el país son informales, lo cual representa que más de 4 mil compañías no tengan ningún respaldo de la autoridad y cuenten con los mínimos filtros para la contratación de sus elementos.