Prosperidad Compartida, la respuesta a la migración
Empiezan a darse algunas muestras de inconformidad por los candidatos “chapulines” y de júniors. Por citar algunos ejemplos, en Texcoco, que es uno de los tradicionales bastiones de la izquierda en el oriente del Estado de México, grupos priístas rechazaron la candidatura a la presidencia municipal de Brasil Acosta, quien pertenece al controvertido Movimiento Antorchista, de ahí la acusación de que el diputado federal con licencia contaría con recursos públicos de Chimalhuacán e Ixtapaluca, ambos municipios en manos antorchistas.
En el conflictivo Atenco, militantes tricolores tomaron el Comité Municipal para impedir el registro del Presidente del Comisariado Ejidal para la alcaldía. Para tal efecto, los ocho aspirantes restantes acordaron no permitir el registro de Andrés Ruíz Méndez por considerarlo una imposición.
En Ocoyoacac, no aceptan la candidatura de Diana Pérez Barragán por considerarlo una imposición del Secretario del Trabajo del Gobierno del Estado de México, Javier García Bejos.
En Villa Victoria llevan ya varios días subiendo “memes” y comentarios en las redes sociales en contra de Mario Santana.
En Tenancingo se manifiestan también en el Fecebook en contra de la candidatura de Tanya Rellstab Carreto por considerarla una candidata “chapulina”.
En el distrito local once con cabecera en Santo Tomás de Los Plátanos, varios aspirantes a esa diputación, nos manifestaron desde hace varios días su temor porque les impusieran una mujer de Valle de Bravo, sin embargo, si fue una imposición y de una mujer, pero no de Colorines sino de Toluca, con la lideresa de la Central Campesina Independiente, Maricruz Cruz Morales.
En Coatepec Harinas, hace tres años grupos priístas antagónicos al diputado federal y ex alcalde Gerardo Hernández Tapia, hicieron perder a Oscar Domínguez Mercado porque era ya la tercera vez consecutiva que esa expresión lograba la candidatura a la alcaldía. Ahora, Domínguez Mercado volverá a ser candidato y ya han lanzado la frase “a ver si esta vez si gana” en las redes sociales.
En Calimaya existen ocho expresiones políticas y cuando llegan a un acuerdo entre ellos, salen avante, sin embargo, enfrentan la amenaza de lo que ellos considerarían una imposición con un colaborador del Senado de la República y supuestamente vinculado al coordinador del Grupo Parlamentario en la Cámara Alta, Emilio Gamboa Patrón. Se trata de alguien de nombre Armando Levy, a quien nunca se le ha visto en los eventos del partido ni en las instalaciones del Comité Municipal, nos platican.
En Lerma, los mismos priístas que reconocen la labor realizada por el munícipe Erick Sevilla Montes de Oca, quien supo tejer estratégicas alianzas con las otras expresiones, habiendo sumado incluso a algunos predecesores suyos. No vieron mal su candidatura a la diputación local, sin embargo, reprueban que haya impuesto a uno de sus protegidos y actual Tesorero del Ayuntamiento, Jaime Cervantes, mejor conocido en el pueblo como “La Marrana”, pues aunque el mencionado contara con buena presencia y reconocimiento, no es sano que una misma expresión política retenga la candidatura para el siguiente periodo constitucional inmediato.
Y así como esos ejemplos podrán ir apareciendo otros en algunos municipios más. Todo dependerá de la habilidad de los operadores del partido que deben aplicar la “operación cicatriz” y lograr un consenso.
Hasta mañana.
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