Operativos en Quintana Roo dejan 11 detenidos y decomisos
NEZAHUALCÓYOTL, Edomex., 2 de agosto de 2014.- En breve entrará maquinaria pesada al predio irregular Las Casitas, para derribar las casas que se levantaron desde hace 10 años durante una invasión del fraccionador Manuel Solís Berber, luego de que a las 5:00 horas entró la fuerza pública para desalojar a unas 300 personas que se encontraban en su interior.
Fueron cinco mil efectivos de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) los que desde las 23:00 horas del viernes esperaban en diferentes puntos de Nezahualcóyotl las órdenes para entrar al predio.
Al principio se decía que ingresarían a la 1:00 de la mañana, pero la acción se realizó a las 5:00 horas para evitar un enfrentamiento con los colonos que se habían preparado con piedras y supuestas bombas molotov, para enfrentarse a la policía.
Durante toda la noche, los invasores se mantuvieron a la expectativa y en guardia en las dos principales entradas, algunos de los colonos prendieron fogatas para mantenerse despiertos.
Pero ya en la madrugada, al ver a la fuerza pública, decidieron no prestar resistencia y salir a dialogar con los comandantes de la SSC para pedir una tregua y que se les permitiera sacar sus pertenencias.
Con la salida del sol, se pudo apreciar la presencia policíaca, así como a más de 300 vecinos que están a la entrada de este terreno, sin presentar resistencia.
Otros colonos se mantienen esperando información, ya que aseguraron que pagaron los terrenos a Manuel Solís Berber, quien durante 10 años les fue cobrando mensualidades, mientras «se arreglaba la regularización del predio por parte del gobierno del Estado de México», lo que nunca sucedió.
Algunos afectados dijeron que entregaron desde 40 hasta 90 mil pesos, porque se les pedía dinero para el pago de los predios, así como para trámites diversos y hasta para el proceso penal que enfrentó Manuel Solís en dos ocasiones por la invasión.
La SSC aún no emite alguna información sobre las condiciones del terreno; asimismo, agentes del Ministerio Público realizan una revisión a la zona, para verificar si hay algún tipo de armas, y que este predio invadido era custodiado por personas armadas bajo las órdenes de Manuel Solís Berber.