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MÉXICO, DF, 16 de diciembre de 2014.- Vecinos del pueblo de Santa Fe efectuaron una cadena humana en el monumento del Ángel de la Independencia, para protestar por el proyecto del tren Interurbano Toluca-Observatorio, que pasará por la avenida Vasco de Quiroga y que perjudicará a más de dos mil negocios, según explican los afectados, y su “construcción desaparecerá el pueblo originario de Santa Fe”, acusa Dante Peñaloza, uno de los portavoces del colectivo Vecinos Unidos de Santa Fe.
La obra se prevé que dure unos tres años y su presupuesto llegará hasta los 38 mil millones de pesos. El tren Interurbano estará conectado desde Zinacantepec, Toluca, hasta Observatorio, pasando por la avenida Vasco de Quiroga de Santa Fe, a través de un viaducto elevado de 18 metros de anchura. Ese ancho, es el mismo que el de la avenida, por ello los vecinos no se fían de la palabra del Gobierno del Distrito Federal, quien alega que no afectará a los vecinos.
“No nos han presentado ningún estudio de impacto ambiental, social o económico, se los pedimos pero nos lo niegan; creemos que no los tienen hechos y que los realizarán a medida que avancen las obras”, explica Marco, otro portavoz de los vecinos.
Las obras del Interurbano deberían haber empezado el pasado 11 de diciembre, pero la Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal, emitió cuatro recomendaciones al gobierno del DF para que aplazará la construcción hasta que no haya consenso con los vecinos.
Al menos 33 colonias se verán afectadas por el Interurbano y, como explican los santafesinos, las negociaciones con los tres niveles de gobierno “están rotas”. De hecho, mencionan que en octubre el GDF, a través del subsecretario de Coordinación Metropolitana y Enlace Gubernamental, Ricardo Ríos Garza, rompió las mesas de diálogo, donde ni siquiera “se tomaban minutas de las reuniones”.
El mayor temor de los inconformes es la expropiación de edificios en la zona, así como la partición del pueblo y los problemas de agua, infraestructura y seguridad que puede crear un viaducto elevado que cope toda la avenida. “En la zona hay colegios, imagínate que cae algo del viaducto durante el receso de los alumnos”, dice Marco, quien no se muestra contrario al tren, pero sí que se haga por la arteria principal, de uno los primeros pueblos fundados en México.
En este sentido, la parte económica de Santa Fe se ha pronunciado a favor del tren, que tendría su estación en el centro comercial de la zona.
“Fueron dos nuestras alternativas, bien soportadas con asesoría de ingenieros, pero el gobierno local las ha desechado. Estamos pidiendo que haya un instituto académico, la UNAM o el IPN o la UAM, con la finalidad que sea una entidad quien emita un dictamen”.
Las alternativas a las que se refiere Dante Peñaloza, está que el tren pase por la avenida Constituyentes o por Río Tacubaya.
Los pobladores de Santa Fe, reiteran que esta infraestructura afectará a las fuentes de trabajo de la zona y que no les beneficiará en nada, por ese motivo, piden reemprender las negociaciones y que todas las promesas, “se den por escrito”, y haya consenso vecinal.