El arte está de luto; muere uno de los más grandes pintores mexiquenses

TOLUCA, Edomex., 29 de septiembre de 2014.- El Gobierno del Estado de México lamenta el fallecimiento del maestro Luis Nishizawa Flores, pintor extraordinario cuya obra es parte del patrimonio cultural del mundo, ya que se encuentra expuesta en diferentes recintos de nuestro país y el extranjero.

Nacido en la hacienda de San Mateo Iztacalco, municipio de Cuautitlán, Estado de México, el 2 de febrero de 1918, Nishizawa fue hijo del japonés Kenji Nishizawa y de la mexicana María de Jesús Flores, de ahí que su interés primigenio haya sido el de hermanar ambas culturas a través del arte.

Influenciado principalmente por artistas como José Clemente Orozco y Rembrandt, así como el pintor japonés Hiroshige, -a quien consideró una de las principales manifestaciones de la relación intrínseca entre la poesía y la pintura japonesa-, el propio Luis Nishizawa declaró que el origen de su obra pictórica está ligado a su niñez, inspirada en una necesidad puramente espiritual que lo llevó a plasmar la cotidianidad, particularmente el intenso amarillo de las flores que adornaron el ataúd de su hermano, imagen que lo persiguió por siempre al momento de pintar.

Formó parte de la vocación nacionalista de la Escuela Mexicana de Pintura, pero su obra se enfocó a un arte libre que abarca desde el expresionismo hasta el abstraccionismo. La obra de Nishizawa está presente en diversos espacios públicos de México y Japón, entre otras naciones, y refleja la unión de sus raíces japonesas y mexicanas con coloridas figuras; la vasta producción artística abarca pintura mural y de caballete, dibujos, vitrales y esculturas, todas ellas realizadas con un alto contenido poético como síntesis del pensamiento humano.

Entre las múltiples condecoraciones que recibió se encuentra el nombramiento de “Maestro Emérito y Doctor Honoris Causa” por la Universidad Nacional Autónoma de México; Premio Nacional de las artes 1996; Miembro Numerario de la Academia de Artes y del Sistema Nacional de Creadores, así como la Condecoración de la Tercera Orden del Tesoro Sagrado del Dragón, que otorga el gobierno Japonés.

A manera de reconocimiento, en 1992 el gobierno del Estado de México creó el Museo-Taller Nishizawa, el cual cumple la doble función de exponer la obra del maestro y, de manera paralela, contribuir a la formación artística de la población, mediante la enseñanza de las artes plásticas, además de contar con el Centro de Información y Documentación “Luis Nishizawa y su tiempo”.

Recientemente se realizaron exposiciones para conmemorar su fructífera trayectoria y sus más de 90 años de vida; algunas de las más destacas han sido: “De paisajes y sueños. Luis Nishizawa 1918 -2008” que realizó el Museo Nacional de San Carlos y en la cual se muestran pinturas de los paisajes mexicanos y “Las vacas flacas y los sueños rotos”, una colección de dibujos expresionistas realizados empleando la técnica de dibujo japonesa, exposición que albergó el recinto que lleva su nombre.

Además, el Consejo Editorial de la Administración Pública Estatal publicó recientemente el libro “Nishizawa”, que recopila gran parte de su obra, en justo homenaje al destacado pintor que falleció a los 96 años de edad.