En 2013 se denunciaron 10 casos de extorsión telefónica por hora

CIUDAD DE MÉXICO, DF., 18 de mayo de 2014.– La extorsión telefónica ha pasado ser el delito que más denuncias registra, por encima del secuestro y el robo de auto. En 2013 la Policía Federal tuvo 10 reportes de este ilícito cada hora; es decir, 239 denuncias por día, de acuerdo con información de SinEmbargo.

Según informes de la Comisión Nacional de Seguridad dados a conocer este domingo por la prensa, el año pasado se tuvo conocimiento de 87 mil 506 denuncias por extorsión telefónica, de las cuales más de la mitad, el 56 por ciento, ocurrieron en el Estado de México y el Distrito Federal, con 27 mil 242 y 24 mil 636 casos, respectivamente.

Detrás de Edomex y de la capital se sitúan los estados de Jalisco, Guanajuato, Puebla, Veracruz, Michoacán, Hidalgo, Querétaro, Chihuahua, Tabasco, Chiapas y Morelos, que representan 25 por ciento del total de las llamadas atendidas.

En el gobierno del Presidente Enrique Peña Nieto, durante el periodo del 1 de diciembre del 2012 al 24 de abril de 2014, se denunciaron 117 mil 829 casos de extorsión telefónica.

En ese mismo periodo, la Policía Federal recibió 888 denuncias por secuestro, 460 por desaparecidos, 426 por trata de personas, 349 por tráfico de armas, 271 contra presuntos secuestradores, 151 contra extorsionadores, 147 contra traficantes de droga y 93 por “daños a la nación”.

De la misma manera en que incrementaron las denuncias, se disparó el número de las extorsiones que se consumaron, ya que mientras en 2010 se comprobó que en 2 mil 764 casos la víctima entregó dinero, en 2013 esto ocurrió en 4 mil 110 casos, según los mismos reportes. De estos mil 148 ocurrieron en el Edomex, y 979 en Distrito Federal.

Quienes cometen este delito se hacen pasar por miembros del crimen organizado, principalmente del cártel de Los Zetas y de los Caballeros Templarios.

Entre las diferentes modalidades de la extorsión se encuentran: venta de boletos para rifa, la detención de familiares y amigos, el tener un familiar en el extranjero, a nombre de un banco, por juegos de fortuna, del trabajo o las que se realizan por supuestos problemas familiares, etc.