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MÉXICO, DF, 5 de febrero de 2015.- Entre llantos, aplausos y manifestaciones de admiración por su valentía y solidaridad, fue velada la enfermera Mónica Orta en Tlalnepantla.
Mónica sufrió quemaduras graves debido a que se resistió a salir del Hospital Materno Infantil de Cuajimalpa en el momento de la explosión. Ella decidió salvar bebés y enfermos a cambio de poner en riesgo su vida. La velación se llevó a cabo en la colonia Ferrocarrilera San Rafael del municipio de Tlalnepantla.
Mónica Orta tenía 32 años de edad y era madre de tres menores, el más pequeño de seis meses.