Fernando y Víctor o cómo el amor venció la discriminación en Mexicali

MÉXICO, DF, 17 de enero de 2015.- Cuando Fernando y Víctor, después de casi 11 años de relación, decidieron unir sus vidas en 2013, no se imaginaron la serie de obstáculos inclusive humillaciones que las autoridades del Ayuntamiento de Mexicali les harían pasar. Sin embargo, este sábado 17 la pareja hizo historia en Baja California al darse finalmente el ‘Sí’.

Tras permanecer dialogando al interior de la oficina de la Presidencia Municipal, se llevó a cabo el matrimonio civil en la explanada del Ayuntamiento de Mexicali, ante poco más de 400 personas que atestiguaron el histórico hecho.

Víctor Manuel Aguirre Espinoza, de 43 años de edad, y Víctor Fernando Urías Amparo, de 37, tuvieron por más de un año y medio una lucha incansable en la capital de Baja California, no sólo por el objetivo de la realización de su matrimonio civil sino por la violación a sus derechos humanos.

Pese a haber ganado un amparo de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), el Registro Civil de Mexicali les había negado el derecho en tres ocasiones.

La pareja de profesión estilista, acudió a la Cámara de Diputados durante la sesión de la Comisión Permanente, donde la senadora del PRD, Lorena Cuéllar Cisneros, en causa común, denunció la violación de derechos humanos en Mexicali, al impedirles a dos ciudadanos del mismo sexo contraer matrimonio.

Fernando Urías manifestó su indignación por el trato que han recibido él y su pareja por parte de las autoridades del municipio gobernado por el panista Jaime Díaz Ochoa, y el Registro Civil de Mexicali, por lo que dijo han tenido que acudir al Congreso de la Unión a solicitar apoyo para evitar que sus derechos se sigan violando.

“Vergüenza tener que salir de nuestro estado para buscar justicia, ya que nuestros legisladores y autoridades no han hecho nada al respecto; por el contrario hacen caso omiso por la doble moral que prevalece”, manifestó en aquella ocasión.

Expresó a Quadratín México su impotencia e indignación porque no se respetan sus derechos más allá de su amor, por lo que conforma la ley y el amparo que les otorgó la Suprema Corte en mano.

En entrevista, acusó que tanto la Oficialía del Registro Civil y el alcalde Jaime Díaz Ochoa. “Son ellos lo que no quieren acatar el fallo de la Suprema Corte, les presentamos un amparo; cuando te da un fallo la máxima institución de justicia del país, qué más haces”, lamentó.

En las tres ocasiones, horas antes de la ceremonia civil, con toda sus familias, amigos e invitados les dijeron que no se iba a poder realizar el enlace.

“Es muy triste que te den un documento firmado donde se comprometen a casarte con fecha y hora, de que ya entregaste toda tu documentación, y horas antes cuando ya toda tu familia y todos tus invitados están contigo y te digan no se va a poder”, narró su experiencia.

La primera vez la oficial Anette Aldrete precisó al representante legal de la pareja, José Luis Márquez Saavedra, sobre la cancelación de la primera solicitud de matrimonios entre personas del mismo sexo, debido a que el Código Civil y la Constitución Política de Baja California no permitían la celebración de la boda homoparental.

La Oficialía 01 rechazó el trámite todo a su vez que dichas “limitaciones” jurídicas y constitucionales determinaban la exclusividad de contratos civiles entre heterosexuales, además que la figura del matrimonio tenía carácter de institución máxima, cuyo fin es garantizar la perpetuación de la especie y sólo puede satisfacerse con la unión de un hombre y una mujer.

En la otra ocasión la alcaldía, adujo que no asistieron a pláticas prematrimoniales, requisito indispensable para llevar a cabo la unión de la pareja.

En el tercer intento, después de más de un año y medio, y segundo después de haber obtenido un amparo del Máximo Tribunal, se les volvió a negar la celebración debido a que la encargada de impartir las pláticas prematrimoniales, Angélica González Sánchez, se opuso a expedir la constancia de asistencia bajo el argumento que sólo impartía dichas sesiones a heterosexuales.

No suficiente, González Sánchez también presidente del Consejo Directivo y apoderada legal de la Coalición de Familias de Baja California atribuyó un diagnóstico de que Víctor y Fernando no se encontraban bien de sus facultades mentales.

El dictamen de dicha “locura” también fue avalado por el Ayuntamiento de Mexicali y el Poder Judicial, pues la encargada de las pláticas prematrimoniales desde hace 28 años, ordenó al secretario del Ayuntamiento, José Félix Arango Pérez, interponer un recurso de impedimento ante el Tribunal Superior de Justicia de Baja California.

Este sábado 17, Fernando y Víctor hicieron historia al convertirse en la primera pareja homosexual en casarse en la capital bajacaliforniana.

Fernando manifestó a Quadratín México que lo mejor de su lucha y movimiento social es haber educado a los demás, pues recibieron apoyo de la sociedad.

“La gente se está uniendo, separó la preferencia sexual del derecho humano. En este lugar la gente ya no se pregunta si son dos gays los que estaban peleando por sus derechos, sino dos personas”, declaró.

Respecto a lo de las sanciones de la SCJN por desacato, el Máximo Tribunal ya lo dirá.

Ambos están en entera disposición de seguir aportando a las demás personas que quieran realizar uniones homoparentales y asesorarlos jurídicamente a través de sus abogados.

Al darse el ‘Sí’, Fernando y Víctor prometieron seguir caminando juntos.