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VALLE DE CHALCO, Edomex., 25 de marzo de 2014.- En el auditorio de la Universidad Interamericana para el Desarrollo (Unid), se llevó a cabo la conferencia “Tlacaélel el azteca, entre los aztecas”, impartida por Antonio Velasco Piña, importante historiador y escritor mexicano, autor de las obras literarias “Regina”, “El retorno de lo sagrado” y “Los siete rayos”, entre otras.
Asimismo, en el recinto de la Unid se hizo un ritual ceremonial prehispánico con la participación de los grupos de danza de la localidad.
El alcalde Jesús Sánchez Isidoro, agradeció al historiador Velasco Piña por distinguir con su presencia a los invitados especiales que fueron convocados para la conferencia y poder transmitir su amplio conocimiento de nuestros antepasados y la relación que esto tiene con el presente actual, de lo que antes se conocía, como Xico (el ombligo del mundo) y que hoy es Valle de Chalco Solidaridad.
Además, reconoció la ardua labor que realiza Miguel Reséndiz, en conjunto con otras personas interesadas en el rescate de las antiguas tradiciones y la promoción de la cultura prehispánica, a través del conocimiento oral.
Artemio Solís Guzmán, representante de la etnia náhuatl, quien acudió en compañía de la maestra Aquetzali Navarrete Reyes, dio un breve mensaje, en su lengua de origen y en español, sobre la cosmovisión que tiene acerca de la vida y del mundo.
“Los llevo en mi mente y en mi corazón, aquí danzaban los pobladores del antiguo Xico, hoy Valle de Chalco Solidaridad, también cuando le daban la bienvenida a alguna mujer o algún hombre que está luchando y sirviendo a su comunidad, el que nace para servir, sirve para vivir, es lo que están haciendo las autoridades, los escritores, los historiadores y todos los que trabajamos en comunidad, todos somos uno”.
También tuvo su intervención el “guardián de los volcanes”, el Temaxtiani Juan Tufiño Bautista, quien dijo que dentro de sus funciones se encuentra la vigilancia de los manantiales, los ojos de agua, proteger los árboles, los animales del campo que se encuentran alrededor de “los eternos enamorados”, el Volcán Popocatépetl e Iztaccíhuatl, además de promover el amor y respeto a la madre Tierra.