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ECATEPEC, Edomex., 4 de marzo de 2014.- En el penal de Chiconautla está recluido Carlos Jonatan Miztli Mingüer Ochoa, un ex empleado del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), quien fue acusado de haber matado supuestamente a su esposa y después ir a tirarla en partes en una carretera del estado de Hidalgo; sin embargo, el muchacho fue torturado para arrancarle una confesión y durante el proceso se han encontrado muchas irregularidades.
Su madre, Patricia Ochoa Herrera, aseguró que su hijo es inocente y la Procuraduría General de la República (PGR) y la Procuraduría General de Justicia del Estado de México (PGJEM) tienen muchas inconsistencias en este caso, como el de un testigo, un taxista que vio supuestamente cómo una persona subía bolsas negras a un auto en el Circuito Ocho, Simón Bolivar, lote 91 manzana 98 del fraccionamiento Las Américas, donde vivían los esposos.
De acuerdo a la declaración del taxista “David”, él llegó el 2 de julio del 2013, «a la cerrada de la manzana 91, me estacioné frente a dicha cerrada y no pude accesar, ya que cuenta con una reja de herrería de color negra, que se encontraba cerrada, pero me estacioné exactamente frente a dicha reja y con mis faros encendidos; en ese lugar bajó el pasajero que llevaba y me pagó la cantidad de 100 pesos».
Además, agregó, «como éste traía varios documentos, descendí de mi vehículo para ayudarle a sacar sus cosas y fue en ese momento que me percaté que dentro de la cerrada, a una distancia aproximada de 10 o 12 metros, se encontraba una persona del sexo masculino quien vestía una pijama de color blanca con franjas verdes, subiendo unas bolsas grandes de color negro, a un coche Neón de color rojo, me llamó la atención, ya que eran las tres de la madrugada y como las luces de mi vehículo alumbraban la cerrada lo alcancé a ver muy bien».
La madre de Carlos Jonatan aseguró que hay contradicciones en la versión del taxista, ya que no pudo ver hacia el interior porque las puertas estaban cerradas; además, tenía una especie de plástico o lona oscura que impedía ver hacia el interior.
Incluso, la casa de su hijo está a una distancia mayor a lo que se estableció en la declaración del taxista.
La desaparición de la esposa
Sandra Gabriela Gallardo Vázquez, esposa de Carlos Jonatan, fue reportada como desaparecida el 2 de julio del 2013, de acuerdo a las declaraciones de su marido, él salió con su hijo a dejarlo a la escuela y después se dirigió al trabajo en la subdelegación del IMSS en la colonia Jardines de Casa Nueva, municipio de Ecatepec.
Carlos Jonatan dijo que él se despidió de ella, dándole un beso, sabía que su esposa se iba a ir a desayunar con un compañero de la escuela en la que estudiaba, pero ya no la vio cuando la fue a recoger por la noche a su trabajo que se ubica en la clínica de la unidad familiar de San Rafael en Coacalco.
Carlos Jonatan Miztli Mingüer Ochoa y su suegra acudieron a la Unidad Especializada de Búsqueda de Personas Desaparecidas de la Procuraduría General de la República (PGR), a reportar la desaparición de Sandra Gabriela Gallardo Vázquez.
Asimismo se hizo la denuncia en el Ministerio Público de Ecatepec y de inmediato a Carlos Jonatan le quitaron su auto para revisarlo, su casa fue cerrada y le decomisaron una computadora y sus celulares.
De acuerdo a la versión de su madre, el vehículo fue inspeccionado, ya que su hijo fue el primer sospechoso, pero no encontraron nada, luego en la casa, sólo en una sandalia había una mancha de sangre «pero nos dijeron que era del niño», el hijo de Carlos Jonatan y Sandra Gabriela.
La detención del esposo
La PGR turnó el caso a la PGJEM y el 1 de octubre del 2013, cuando se agotó el término legal de la investigación, la agente del Ministerio Público de Ecatepec, Alejandra Arenas Pineda, formuló la acusación en contra de Carlos Jonatan bajo la averiguación previa AP/PGR/SDHPDSC/UEBPD/13/2013 por el delito de homicidio en su modalidad de feminicidio en agravio de Sandra Gabriela.