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MÉXICO, D.F., 6 de mayo de 2014.- En la Ciudad de México se denunciaron 168 secuestros en sólo 13 meses.
Un informe de la PGR, al que Reforma tuvo acceso, señala que la Unidad Especializada contra el Secuestro inició 102 averiguaciones previas entre el 1 de diciembre 2012 y el 31 de diciembre de 2013.
En ese mismo periodo, la Procuraduría capitalina (PGJDF) reportó 66 denuncias.
Según el informe, que este martes da a conocer la organización Alto al Secuestro, las delegaciones con más casos fueron Iztapalapa, con 44; Tlalpan, con 18; Gustavo A. Madero, con 16; Coyoacán, con 15, y Venustiano Carranza y Álvaro Obregón, cada una con 12.
Estos datos no contemplan la cifra negra; de acuerdo con organizaciones no gubernamentales, el 80 por ciento de los casos no son denunciados.
Sin embargo, las autoridades capitalinas han insistido que este delito va a la baja.
Lidera Iztapalapa
Iztapalapa es la demarcación que encabeza el número de secuestros, pues se denunció el 26 por ciento de plagios ocurridos en la ciudad, señala el periódico Reforma.
Entre los factores detectados por la PGJDF para el elevado número de plagios es que la demarcación se encuentra en los límites de zonas criminógenas del Estado de México.
Ambas entidades han detectado la existencia de bandas de secuestradores que tienen sus casas de seguridad en los municipios Chalco, Los Reyes o Nezahualcóyotl, pero plagian en el DF.
Entre las organizaciones delictivas que se ha detectado su operación en esa zona están Los Gatos, Los Argeo, El Tepiteño y Los Guayabas, aunque varios de sus integrantes ya han sido detenidos, dichas bandas también operaban en el Edomex.
En las dos entidades se denunciaron ante la PGR y la PGJEM, del 1 de diciembre 2012 al 31 de diciembre del 2013, un total de 508 plagios.
Al respecto, Isabel Miranda de Wallace, presidenta de la asociación Alto al Secuestro, señaló que las procuradurías del país no han cumplido con los acuerdos del Pacto Nacional de Seguridad, pues no existen programas para verificar la efectividad de cada dependencia o unidad antisecuestros.
«Las procuradurías no han desarrollado bancos de voces, las campañas de prevención han sido muy insípidas, todo se ha quedado en el papel, la ley dice que deben darle capacitación al personal antisecuestros, no se respetan los perfiles de los policías que se capacitan para el secuestro y no es buena la capacitación».
«Tampoco hay un protocolo de atención a las víctimas, cada quien lo hace como mejor puede, tampoco hay protocolos para la investigación, por eso no se ha reducido la incidencia del secuestro, porque no se está cumpliendo», dijo Miranda de Wallace.