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TOLUCA, Edomex., 31 de marzo del 2014.- Desde hace 42 años, el señor Eloy Flores Alvarado acudía a la esquina en las calles de Independencia y Benito Juárez en pleno centro de la capital estatal a comerciar como todos los días sus ricos y sabrosos tamales de chile, de rajas, mole verde, sin faltar los de dulce, además ofrecía a su ya abultada cartera de clientes atole de dos o tres sabores “para que tuviera variedad”.
Hoy decidió cambiar su puesto y sus horas de venta para que, conjuntamente con otros cuatro tamaleros más fueran escuchados por la alcaldesa de la capital mexiquense Martha Hilda González Calderón, pues denuncian abusos de parte de los inspectores del ayuntamiento local.
Al inicio de su actividad, no se tenían papeles del gobierno municipal, nadie los necesitaba, pero cuando la autoridad municipal buscó regular su trabajo acudió a obtener los permisos requeridos, hasta el 2013, pues fue cuando Martha Hilda tomó posesión que su negocio, con el que había logrado sacar adelante a sus hijos y hasta sus nietos.
Ahora, aseveró don Eloy, las autoridades locales sólo le pretenden otorgar licencia para vender sus alimentos de las 8:00 a las 9:30 de la mañana, ni un minuto más, en total 90 minutos para vender su mercancía, recoger la basura, limpiar su lugar y retirarse, porque de lo contrario será remitido por la autoridad y su cuerpo de inspectores a las bodegas con todo y sus ollas.
Lo curioso, dice el vendedor, es que ha surgido un grupo de 10 tamaleros que están arropados por la bandera del Partido de la Revolución Democrática, encabezados por el 15º regidor local y que a ellos el permiso es de las 8:00 horas hasta que terminen su venta.
Los tamaleros esperaron, la autoridad nunca salió y Martha Hilda… Martha Hilda ya había desayunado en casa.