Encuentran a hombre sin vida en auto en Santiago Tianguistenco
TEXCOCO, Edomex., 10 de octubre de 2014.- En el pasillo principal de la Universidad Autónoma de Chapingo (Uach), se realizó una ceremonia luctuosa al profesor Miguel Reyes Vigil, quien fuera encontrado sin vida la tarde del jueves a unos 300 metros de las instalaciones de esta casa de estudios.
Los padres del académico y familiares acompañaron sus restos que fueron llevados en una carroza fúnebre ante la comunidad universitaria, aunque no entraron a la capilla Riveriana por las condiciones en que se encontró el cuerpo.
Compañeros académicos, alumnos y familiares montaron guardia, mientras que sus compañero mentores hicieron su remembranza personal.
«Teníamos un pacto como de guerra fría, de que ninguno hablaría de las cosas negativas de cada quien, para poder llevarnos la fiesta en paz», dijo uno de sus compañeros, recordando la valía como amigo y académico del profesor Reyes Vigil.
José Alfredo Espejel Zaragoza, director del departamento de Agroindustria en donde laboraba Miguel Reyes, lamentó la pérdida del maestro, de quien dijo que tuvo una trayectoria ejemplar, con una inteligencia muy lúcida, pero sobre todo fue un gran ser humano.
«Va a ser muy difícil llenar el espacio que él deja, la comunidad de Ingeniería Agroindustrial y la comunidad chapinguera, está consiente de ello, pero nos deja un ejemplo de valor, de conciencia, de integridad como ser humano», señaló.
Aunque el profesor fue encontrado sin vida en un terreno baldío de la calle Nogal de la colonia Salitrería, a unos metros de la Uach, el director de Agroindustria rechazó que se tratara de una situación de inseguridad, señalando que la información que la familia dio a sus compañeros indica que el deceso nada tuvo que ver con algún echo violento.
Además, comentó que sólo recomienda a la comunidad universitaria seguir su ejemplo para cambiar al mundo de manera positiva y procurar hacer bien el trabajo.
Por otro lado, cabe mencionar que hacia las 16:30 horas finalizó la ceremonia luctuosa, para conducir después los restos del académico a un cementerio en el Distrito Federal.