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TOLUCA, Edomex., 15 de enero de 2014.- Los platillos tradicionales forman parte esencial de la cultura del país y, en México, los últimos meses se caracterizan por ser de los que más festejos concentran en el año. En consecuencia, un alto porcentaje de mexicanos sufren incremento de peso corporal y niveles de grasa en su organismo, los cuales pueden afectar seriamente su salud.
Alfredo Martínez Benítez, jefe de la Oficina de Cultura Física y Deporte del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), Delegación Estado de México Poniente, menciona que inmediatamente que concluye la temporada festiva es momento de recurrir al ejercicio físico como medio para aumentar el gasto energético y así perder peso.
“Para cualquier persona sería dañino correr un maratón, debemos tener presentes nuestras limitaciones y considerar nuestras capacidades para llevar a cabo alguna actividad, pero sin perder la constancia. Está comprobado que el ejercicio que se realiza de manera irregular, por ejemplo, cada fin de semana, no aporta ningún beneficio. En cambio, repetirlo tres o cuatro veces a la semana durante 30 o 40 minutos pondrá en funcionamiento la mayoría de los órganos del cuerpo”, afirma Martínez Benítez.
Para superar los estragos de las fiestas navideñas se sugiere realizar actividades físicas como trotar, bailar o caminar. La intensidad del trabajo físico genera importantes beneficios para el organismo cuando se lleva a cabo por arriba del umbral acostumbrado; se trata de que la carga de trabajo deje en el cuerpo una fatiga que el organismo pueda resistir.
En dichas condiciones el cuerpo responde aportando más nutrimentos energéticos para superar y soportar el esfuerzo, consiguiendo la adaptación biológica para ejercicios más pesados. El experto del Seguro Social, asegura que de esta forma el organismo se adapta a las condiciones del esfuerzo físico a que va siendo sometido, por lo cual es recomendable ir aumentando la intensidad del ejercicio, de lo contrario llegará el momento en que ya no origine cambios biológicos en el cuerpo.
Tomando en cuenta lo anterior, se puede programar una actividad física inicial, como caminar, trotar, bailar, etc., recordando siempre que los movimientos del cuerpo sean rítmicos, sencillos y aeróbicos y que no se realicen con fines de competencia ni contra reloj.
La actividad física recomendada para personas saludables a partir de los 14 años consta de cinco etapas:
En la primera se hace una caminata a paso normal unos minutos, seguida de una caminata-trote por 10 o 15 minutos, preparando al cuerpo para trotar, con la misma duración de la etapa anterior y pasar de trotar a correr por un periodo de 20 a 25 minutos, al final se debe correr ya a una buena velocidad, aproximadamente unos 20 minutos, y relajar el cuerpo al final volviendo a una caminata sencilla.
El IMSS Estado de México Poniente, recomienda mantener de manera constante por tres o cuatro meses la actividad física moderada y poco a poco incrementar la intensidad o cambiar de actividad para que el cuerpo siga poniendo en función todos sus órganos, además de acudir periódicamente con su médico familiar para vigilar su estado general de salud y comprobar que el ejercicio que realiza es el adecuado para su condición.