Operativos en Quintana Roo dejan 11 detenidos y decomisos
TOLUCA, Edomex., 9 de junio de 2014.- Cuando Víctor Figueroa, de la Unidad de Rescate Aéreo Relámpagos, sabe que va a trasladar a un niño, toma su nariz de payaso y sube al helicóptero.
El paramédico del Edomex, con 15 años de experiencia, utiliza la risoterapia para darles confianza a los pequeños, señala Reforma.
«Maverick», como es conocido el técnico en urgencias médicas, participó el miércoles en el traslado de Mitzi, una niña de cuatro años, desde Tejupilco, Estado de México, hasta el DF.
La pequeña está en la lista de espera para recibir la donación de un hígado, aunque el órgano por el que viajaba lo recibió otro menor que tenía mayor urgencia de él.
Ese día, Mitzi estaba estresada, pero su rostro cambió cuando vio a los paramédicos con narices de payaso, las cuales reparte Figueroa entre sus compañeros.
«Por sí sola (la risoterapia) no ha mostrado que cure, pero tiene beneficios porque actúa a nivel emocional, y esto produce sinergia con nuestros pacientes pediátricos.
«Aplicar la risoterapia con una nariz de payaso a través de hablarles de una manera angelical, darles un apoyo psicoafectivo, nos ayuda a obtener su confianza y sacarlos adelante», comenta «Maverick».