Balazos en el pie
A pesar de encontrarnos en plena efervescencia mundialista, los políticos no dejan de trabajar, claro, en su futuro, pero la llegada de Carlos Iriarte Mercado como líder del PRI en el Estado de México mueve todas la preferencias electorales que se pudieran haber gestado con Raúl Domínguez Rex, ahora los interesados en ser candidatos tienen que iniciar de nuevo su labor para ser bien vistos por el nuevo presidente y captar la atención de La Mayoría Silenciosa.
Por ejemplo, en Tlalnepantla los ánimos están calientitos entre tres personajes en el PRI que de manera pública se ven en las boletas electorales para el próximo año, Denisse Ugalde, Marco Antonio Rodríguez y Amador Monroy Estrada. Dos del PAN que deben salir unidos para dar la pelea, en el PRD no hay una sola figura que demuestre que quiere y puede con el paquete que representa enfrentar a estos partidos y, Movimiento Ciudadano que dará la sorpresa al presentar un candidato con cierto frescor ciudadano, pero con el apoyo de la experiencia de su hermano político, ¿tal vez un Mendoza Ayala?
En el PRI Denisse Ugalde se acoge a la figura de su padre, quien confía en contar con el apoyo del líder nacional del Partido Revolucionario Institucional, César Camacho Quiroz, sin embargo, el PRI tiene que valorar qué tanto pesa la imagen negativa que dejó el papá de la diputada federal en el municipio, porque mucha gente no ve con buenos ojos el apellido, mientras la aspirante cuenta con una imagen fresca para el partido, el papá representa todo lo malo de los dinosaurios tricolores.
El Tony tiene prendidas sus veladoras para que Eruviel Ávila lo impulse y logre posicionarlo como candidato del PRI a la presidencia municipal por segunda vez, no se sabe a ciencia cierta cuánto le debe el PRI al diputado del Panal, como para darle otro cargo -aparte de la diputación local que ya logró-, pero hay quienes afirman que Marco Antonio cuenta con la aprobación de Eruviel para llegar a la alcaldía.
Quien menos posibilidades tiene para gobernar Tlalnepantla es Amador Monroy Estrada, acogido por el sindicalismo, el diputado local sabe a ciencia cierta que difícilmente el PRI le pondrá en las manos la alcaldía, sin embargo, mueve sus piezas para ser tomado en cuenta, desafortunadamente su carta fuerte acaba de dejar el PRI y ahora es secretario de Desarrollo Metropolitano, perdiendo mucha influencia para decidir.
En la película de los priistas todavía falta saber quién es el delfín del presidente municipal Pablo Basáñez, como alcalde tiene la posibilidad de opinar y proponer a un aspirante, hay varios que han trabajado de cerca con él pero hasta ahora no han salido a la luz pública para dar a conocer sus aspiraciones, así es que habrá que esperar para conocerlo.
En el PAN, por obvias razones, es necesario mencionar a Ulises Ramírez actual coordinador de los diputados en el Congreso local, ex alcalde y líder del Grupo Tlalnepantla. Hasta ahora el líder panista no ha dado muestra de querer regresar a la alcaldía, pero en todo caso mandaría a alguien afín a su grupo. Quien se observa con más posibilidades es Adrián Juárez, diputado local, que se ha estado moviendo por todo el territorio municipal para llevar a cabo acciones en favor de la ciudadanía y así posicionarse en las preferencias electorales.
Movimiento Ciudadano prepara la inclusión de Eduardo Mendoza Ayala para dar la sorpresa en los comicios del próximo año y, a pesar de estar poco desligado de la política en los últimos tiempos, seguro contará con la ayuda de su hermano Rubén.
En el PRD no se ve una figura que pueda destacar o al menos competir de manera seria por la candidatura a la presidencia municipal de Tlalnepantla, tendrán que construir en poco tiempo una opción para que La Mayoría Silenciosa los ubique como una alternativa seria.