
Deportaciones forzadas “Made in USA”
La educación presenta grandes problemas; queremos una educación que enseñe a razonar y evaluamos y escogemos con reactivos básicamente memorísticos; y para complementar no escogemos a los mejores candidatos de acuerdo con la información disponible. Cada año, este proceso de selección se le encomienda a la COMIPEMS, la que debería evaluar la eficiencia de su proceso de selección. Para evaluar la eficiencia del examen de admisión administrado basta con obtener los promedios obtenidos por los sustentantes un año después. Como se tienen datos de varios años, se pueden encontrar las correlaciones correspondientes. Esta información permite evaluar el proceso de admisión.
Causa de malestar social el hecho de que no se está escogiendo a los mejores candidatos en el proceso de admisión de alumnos. Se desecha el promedio del ciclo anterior bajo el argumento de que cambia de escuela a escuela, sin embargo los estudios estadísticos muestran que el promedio del ciclo anterior es mejor predictor del rendimiento académico que el examen de admisión. Esto se hace tanto para entrar al Bachillerato como a las Facultades de la UNAM.
Datos de la Universidad de Guadalajara corroboran este punto de vista, e inclusive, que tienen mejores reactivos, ya que tienen mejores coeficientes de correlación. La Universidad de Guadalajara escoge mejor a sus estudiantes, pero considero que el tema es demasiado importante para no optimizar el procedimiento en la capital del país, afectando a un número mayor de estudiantes.
El no tomar en cuenta el promedio del ciclo anterior, hace que al no escoger a los mejores candidatos baje la eficiencia del Bachillerato y de las Facultades; además de mandar el mensaje equivocado de que no sirve el trabajo continuo, basta con tener suerte en un examen de opción múltiple. En Japón, donde la admisión de un estudiante depende de un examen único, ha llevado al suicidio a jóvenes rechazados. Otro factor es el hecho de que los reactivos usados por la UNAM y COMIPEMS sean básicamente memorísticos y poco conceptuales, reafirmando en los profesores del ciclo anterior su convicción de que aprendizaje es memorización, dejando de lado los placeres asociados al razonamiento.
Dado que se tienen datos de muchos años, su interpretación debe producir una calificación de admisión que mezcle de un modo óptimo, las diferentes secciones del examen de admisión y el promedio del ciclo anterior. Puede inclusive, corregirse el promedio por escuela, y ajustar coeficientes de acuerdo a la carrera que se solicita. Además, teniendo las curvas de promedio y de examen de admisión por escuela, podrá observarse si hay diferencias entre ellas, permitiendo que la comunidad sepa cuales son las mejores, e incentivando a las no tan buenas a mejorar. Es necesario mejorar el país en que vivimos y que solamente resolviendo las causas de malestar, podemos evolucionar en un sentido positivo. Nos interesa que México prepare a los mejores estudiantes, para producir los profesionistas que el país requiere.