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TOLUCA, Edomex., 11 de agosto de 2014.- Aunque México se ha distinguido por firmar tratados internacionales que garantizan los derechos indígenas; en la realidad, los funcionarios del gobierno estatal y federal no están implementando políticas públicas estatales que permitan la libre autogestión de las comunidades, sostuvo Carlos Alejandro, diputado federal perredista por el estado de Guerrero.
En el marco del Encuentro de los Pueblos Indígenas del Estado de México que se registra en Poder Legislativo local y de cara al foro internacional, a celebrarse en la Organización de las Naciones Unidas (ONU), el parlamentario federal reconoció que los pendientes que México tiene con sus pueblos originarios son innumerables.
«México está obligado a honrar los acuerdos que ha firmado con organismos Internacionales. Se debe hacer lo necesario para garantizar que las leyes se cumplan», dijo.
Durante el evento en el salón Benito Juárez, panelistas y asistentes coincidieron en señalar que a 22 años de que la nación mexicana se adhiriera a los tratados internacionales para garantizar los derechos de las comunidades indígenas, las situaciones adversas para millones de indígenas no han cambiado de manera sustancial.
“A 22 años de la firma del documento ante la ONU, en este país México no ha cambiado nada. Seguimos padeciendo los mismos problemas”, comentó uno de los asistentes.
Al evento también acudieron líderes y representantes de los cinco grupos originarios de la entidad: náhuas, tlahuicas, matlazincas, otomíes y mazahuas, los cuales dialogan sobre la postura que se debe asumir como grupos originarios ante las autoridades mexicanas e internacionales.
“Para hacer que nuestras comunidades salgan adelante, la política de Rosario Robles desde Sedesol, consiste en ir a darnos de comer (comedores comunitarios); decirnos qué tenemos que comer y qué no; piensan que con darnos de tragar ya estamos contentos y todavía se atreven a decirnos que nos van a enseñar a trabajar. Quiero que la postura de ustedes (representantes indígenas ante la ONU) sea contundente y firme,y que hablen con la verdad”, comentó una vecina de la zona norte de la ciudad.
Asimismo, los asistentes enfatizaron que en los foros locales, estatales, nacionales e internacionales, la voz de las comunidades indígenas es llevada por sus mismos actores, pues ya no requieren que dirigentes de Organizaciones No Gubernamentales o de Comisiones de Derechos Humanos, interpreten el sentir y exigencias de los habitantes originarios de México.
De acuerdo con datos oficiales, se estima que hay aproximadamente 7 millones de indígenas en México, de los cuales 379 mil son mexiquenses (5.8 por ciento), población que coloca a la entidad en el séptimo lugar a nivel nacional.