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ECATEPEC, Edomex., 21 de mayo de 2014.- El recién procurador saliente Miguel Ángel Contreras Nieto, dejó pendiente y sin investigar la agresión que sufrió hace un año la diputada local del PRD Xóchitl Arzola, de parte de un hermano del también legislador Octavio Martinez.
Así lo dio a conocer la propia afectada, quien explicó que los agresores, encabezados por Fernando Martínez Vargas, gozan de total impunidad a un año de distancia; no obstante, dijo que ante la Procuraduría mexiquense se presentaron exámenes médicos que avalaban las lesiones y versiones de los testigos.
De igual manera, dijo que la Comisión Nacional de Garantías del Partido de la Revolución Democrática (PRD), quien dio entrada en agosto pasado a la queja interpuesta por la diputada Xóchitl Arzola y cuatro de sus colaboradores, tampoco ha emitido resolución alguna.
Asimismo, explicó que hace unos días acudió nuevamente ante la Procuraduría del Estado de México, donde los huecos legales hablan de un careo para mediar la agresión; sin embargo, agregó que la Ley de Acceso de las Mujeres a una Vida libre de Violencia señala en uno de sus apartados que, en caso de violencia contra la mujer, la Procuraduría tiene prohibido generar cualquier tipo de mediación entre víctima y victimario.
Es decir, ese hueco legal se traduciría en que el hermano del diputado Octavio Martínez Vargas tuvo que haberla golpeado esa y otras ocasiones más para que no haya mediación.
Por lo anterior, desde la Cámara de Diputados se elaborará un compendio de vacíos legales para hacer las leyes más cerradas y evitar actos de impunidad como del que actualmente es objeto, añadió Xóchitl Arzola.
A raíz de la agresión, el diputado Octavio Martínez, desde la Cámara, intentó una y otra vez desvirtuar los hechos, señalando incluso que fue la diputada quien agredió a su hermano Fernando.
“Lamentable que el diputado maneje un doble discurso, pues por un lado pide freno a la violencia hacia la mujer, y por el otro encubre a su hermano”, concluyó la diputada Xóchitl Arzola.
El Antecedente
La noche del 17 de mayo del 2013, la diputada perredista Xóchitl Arzola y su equipo de trabajo fueron agredidos verbal y físicamente por un grupo de sujetos armados con palos y cadenas, encabezados por Fernando Martínez Vargas, hermano del diputado Octavio Martínez Vargas, entonces presidente de la Diputación Permanente de la Cámara de Diputados; tras la agresión,
los responsables huyeron con rumbo desconocido a bordo de dos vehículos.
Por la tarde-noche, la legisladora y personal, entre ellos Joel Hernández (asesor de la diputada) se encontraban en las inmediaciones del módulo de afiliación del Distrito 33, ubicado en Playa Erizo, manzana 570 y Oriente 21, en la Colonia Jardines, hasta donde se presentaron Fernando Martínez Vargas, hermano del diputado Octavio Martínez Vargas, acompañado de Sergio Medina, conocido como “El Gallo”, y un grupo de sujetos para intimidar a los presentes.
Luego de mediar algunas palabras, los sujetos golpearon al personal de la diputada Xóchitl Arzola, quien al ver lo ocurrido se acercó para calmar los ánimos; sin embargo, Fernando Martínez Vargas le dio un puñetazo en el rostro que la hizo caer y ya en el suelo le propinó una patada.