Suman 41 detenidos por Operación Enjambre; será permanente el ejercicio
LONDRES, Reino Unido, 14 de enero de 2015.- Tal y como reporta Excélsior, un joven británico de 19 años llamado Lewis Daynes fue sentenciado este lunes a cadena perpetua por haber asesinado a su ‘amante’ de 14, lo que cierra el último capítulo de una historia de horror que puso bajo alerta a los padres en el Reino Unido sobre el tipo de amistades que tienen sus hijos en redes sociales.
Lewis Daynes, quien fue descrito por la corte de Reino Unido como un “criminal peligroso y manipulador, un joven raro afín a las computadoras”, habría utilizó su apariencia infantil para ‘seducir’ a varios menores, incluyendo a Breck Bednar, un joven de 14 años a quien asesinó en febrero del año pasado de un certero corte en la garganta luego de violarlo.
Lewis confesó su crimen a las autoridades durante una llamada al servicio de emergencias el día del asesinato:
OK. Hola, necesito que venga la policía y un equipo forense a mi dirección por favor.
¿Qué quiere decir? ¿Qué pasó?
Mi amigo y yo tuvimos un altercado y yo fui el único que salió vivo.
¿Me está diciendo que mató a alguien?
Sí.
Bien, ¿Y con quién hablo?
Mi nombre es Lewis Daynes, tengo 18 años. Mi amigo vino a quedarse por la noche ayer porque se sentía deprimido, se sentía suicida. Y desperté esta mañana, estaba hecho un desastre. Lo intenté calmar. Lo abracé y le dije que estaría con él. Él me ignoró.
No diga más. ¿Me está diciendo que está realmente muerto?
Sí.
¿Tuvo una discusión con él por la noche?
No, estuvimos bien. Ambos estábamos bien.
¿Por qué se quedó con usted?
Porque estaba cansado con su vida en casa. Tenía muchos problemas. Lo había conocido por mucho tiempo antes de que viniera y se quedara conmigo. Estuve en Tailandia la semana pasada de vacaciones, él en España.
OK, entonces ambos fueron a dormir, ¿Qué pasó esta mañana?
Desperté. Él estaba parado. Era un desastre, tenía las manos en su rostro, me levanté y puse mis brazos a su alrededor y le dije que estaba bien. Él sólo me ignoró y dijo “no”, de hecho no recuerdo exactamente bien qué fue lo que dijo. Hablaba de que no quería ir a casa, que estaba harto con su vida y que no quería irse. Tenía una navaja al lado de mi cama. Él la sacó, la abrió y perdió el control. Yo, en defensa propia, puse mi brazo izquierdo para evitar que me navajeara, forcejamos. Lo tiré al suelo, se levantó, levanté la navaja.
OK.
¿Podría no interrumpirme con esta parte? ¿Estamos siendo grabados?
Sí.
Tomé la navaja y le di una vez en la parte de atrás de la nuca, creo, en alguna parte cerca del tronco encefálico. Se volteó y creo que tropecé con mi cómoda. Me caí, me levanté, retrocedí y no recuerdo exactamente pero la pelea terminó conmigo cortándole la garganta. Creo que me di la vuelta y le corté la garganta. Cayó de frente en mi cama. Intenté detener la hemorragia. Cayó al piso y no pude detenerla. Su garganta está cortada.
¿Dónde está?
Mire, no interrumpa, quiero explicarlo si esto está siendo grabado. No sé lo que pasó, siento como si yo me hubiera matado. No recuerdo que pasó después de todo. Todo lo que sé es que tiré la navaja en el pasillo, me quité la ropa y me metí a la regadera.
Dejó el arma en el pasillo, ¿Cuánto ha pasado en la regadera?
No lo sé. ¿Ya viene la policía? Escucho sirenas.
Ya van, ya van.
Me iré y haré mi parte. Gracias por su ayuda.
Conforme a Excélsior, Lewis habría hecho artimaña de una prática conocida como grooming, la cual consiste en establecer lazos de amistad con un niño en aras de obtener satisfacción sexual al recibir imágenes eróticas o pornográficas.
En ese sentido, se reporta que el joven Lewis se cortó las ropas luego de confesar su crimen a la operadora del 911 e intentó destruir su equipo de cómputo para borrar evidencia de las conversaciones en línea que tenía con Breck, no sin antes compartir imágenes del cadáver con un amigo vía correo electrónico.
Lewis y Breck habrían sostenido conversaciones por meses a través de correo electrónico y otros servicios de mensajería luego de conocerse jugando en línea, pero ambos no se conocieron físicamente hasta horas antes de ocurrido el asesinato.
Durante el juicio por el asesinato, la corte pudo ver correos electrónicos en los cuales Lewis le propuso a Breck trabajos ficticios y sueldos estratosféricos de dinero, para ganarse su confianza. El joven le prometió 85 millones de libras luego de que se concretara la venta de una supuesta compañía de cómputo.
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