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NEZAHUALCÓYOTL, Edomex., 1 de febrero de 2014.- Para vestir al Niño Dios más grande del mundo se necesita confeccionar la ropa más grande del mundo.
Y para que esté lista este 2 de febrero próximo, Día de La Candelaria, decenas de personas trabajan para elaborar el ropón que lo vestirá.
De acuerdo con información de El Universal, desde hace un mes muchos metros de tela se cortan y miles de metros de hilo han utilizado manos de hombres y mujeres para que no falte a su cita el recién nacido que ya fue bautizado como El Niño Dios de la paz y el bien por el padre Francisco Javier de la iglesia de Nuestra Señora de Las Nieves.
«El párroco consideró que si esta imagen monumental va a estar en varias locaciones debe llevar un mensaje de paz, un mensaje de bien, es por eso que se le llama El Niño de la paz y el bien», explicó Abraham Gómez, productor ejecutivo de Morphix Group, empresa que promueve el proyecto.
Este Niño Dios es considerado la obra artística monumental más grande del mundo. La figura de casi media tonelada de peso y de cinco metros de altura se encuentra ahora en la calle 31 de la colonia Ampliación Las Águilas, en Nezahualcóyotl. El ropón se confecciona en un taller de la unidad Ermita Zaragoza.
La pieza fue elaborada por un grupo de diseñadores, artistas plásticos, ingenieros y arquitectos, quienes trabajaron más de tres meses para terminarla y fue presentada el pasado 24 de diciembre.
La escultura está conformada, principalmente, por un esqueleto de acero y unas pastas de cerámica que fueron aplicadas con técnicas pioneras en su tipo, pues se tallaron como si se tratara de madera.
El Niño Dios es la primera pieza que realiza este grupo de artistas, quienes pretenden crear el nacimiento monumental más grande del mundo.
«En la elaboración del puro vestido trabajan alrededor de 30 personas, entre diseñadores y confeccionistas, costureros, maquinadores. Se están empleando más de 75 metros de tela, miles de metros de hilo. Además se iluminará por la noches con un sistema tipo led para generar un efecto de luz de color azul y blanco», dijo Abraham Gómez.
Hasta ahora, sólo en la ropa se han invertido más de 85 mil pesos. Han contado con el apoyo económico de algunos patrocinadores y de las limosnas de los feligreses.