
Detienen a 6 presuntos integrantes de grupo que asalta en carreteras
IXTAPALUCA, Edomex., 15 de abril de 2025.- El parque acuático de San Buenaventura, inaugurado en 2017 como un espacio recreativo para miles de familias, lleva más de tres años cerrado y en total abandono. Vecinos denuncian el deterioro del recinto, la falta de atención del gobierno municipal encabezado por Felipe Arvizu y una creciente inseguridad en la zona.
Lo que alguna vez fue un centro de convivencia con albercas, juegos acuáticos, palapas, áreas verdes y vestidores, hoy es un espacio vandalizado, con cristales rotos, estructuras oxidadas y puertas cerradas con sellos de clausura. El parque, ubicado dentro de la unidad habitacional San Buenaventura, dejó de operar antes de la pandemia, pero nunca volvió a abrir sus puertas.
“Ya no permiten el acceso, todo está destruido. Hemos denunciado esto ante el ayuntamiento en varias ocasiones, pero no hay solución”, afirmó Martha Gómez, vecina del fraccionamiento. Ella recuerda cómo el parque se llenaba de familias, especialmente en Semana Santa o días de calor, y ahora luce como un terreno abandonado.
Aunado al abandono del parque, los vecinos señalan que la colonia enfrenta una serie de carencias que el gobierno municipal ha ignorado: alumbrado público inservible, calles en mal estado y una creciente ola de robos a transeúntes y viviendas.
Es patrimonio social de los vecinos
“Es frustrante que no escuchen nuestras demandas. Este parque era de todos, y su deterioro afecta a toda la comunidad. No sólo es un tema de esparcimiento, también es un foco de inseguridad”, expresó una activista local que prefirió no dar su nombre por temor a represalias.
Vecinos organizados han entregado oficios y peticiones al ayuntamiento sin obtener respuesta. Algunos aseguran que el terreno está en riesgo de ser destinado a otros fines, sin consultar a la comunidad.
“El parque era parte del patrimonio social de la zona. Ahora parece que lo quieren dejar morir para justificar algún proyecto privado”, opinó un residente que ha vivido más de 20 años en San Buenaventura.
El mal estado del parque también afecta a comerciantes de la zona que antes vendían alimentos, bebidas y artículos de temporada en los alrededores. “Nos quitaron una fuente de ingresos y también un lugar seguro para nuestros hijos”, comentó una madre de familia.
Mientras tanto, las familias de Ixtapaluca ven cómo uno de los pocos espacios recreativos de acceso gratuito se transforma en ruinas. La exigencia al alcalde Felipe Arvizu es que rehabilite el parque y escuche a la ciudadanía antes de que sea demasiado tarde.