La Polémica | A 10 días, robos y saqueos en ayuntamientos
Hoy arrancaron cinco mesas temáticas previas a la vigésima segunda Asamblea Nacional del Partido Revolucionario Institucional, las cuales serán transmitidas en vivo por Internet para promover la transparencia.
De estas mesas saldrán resoluciones que tomará el PRI como ruta para el proceso electoral. Uno de los puntos a analizar es el candado de militancia de diez años para candidatura presidencial.
Que a uno les conviene y a otros no.
¿Quiénes quieren abrir el candado? Es decir, que se elimine el requisito de diez años de militancia.
Enrique Ochoa Reza, líder nacional del partido; Claudia Ruiz Massieu, secretaria General; César Camacho, coordinador de diputados del PRI y Jorge Carlos Ramírez Marín, representante del PRI ante el INE.
Por otra parte, hay quienes quieren conservar este candado y exigen que se elija al aspirante por consulta directa a los militantes y simpatizantes.
Manlio Fabio Beltrones, ex líder nacional del partido; Ivonne Oetega, quien encabeza el Movimiento Nacional #RecuperemosAlPRI y quien ha expresado que quiere ser la candidata. También, Ulises Ruiz, quien pertenece a la corriente «Democracia Interna», que afirma que no hay democracia al interior y que afirma que el PRI está secuestrado por unos cuantos que deciden el futuro de los militantes. César Augusto Santiago, quien encabeza la corriente alternativa del PRI y que propone convertirlo en el Partido de la Revolución Ciudadana. Hugo Díaz Thomé, presidente Nueva Corriente Democrática, que pretende arrebatar la sucesión a el presidente de México, Enrique Peña Nieto.
El cambiar este requisito, abre o cierra puertas a los candidatos. Los que se volverían presidenciables, de abrirse el candado, son Aurelio Nuño, secretario de Educación y José Antonio Meade, secretario de Hacienda.
Los que pierden de abrir este candado, porque habría más competencia son: Miguel Ángel Osorio Chong, secretario de gobierno; José Narro, secretario de Salud, Ivonne Ortega y Enrique de la Madrid, secretario de Turismo.
Lo cierto es que la clase política del PRI se divide ante la que podría ser la elección más difícil, lo que podría costarle perder la silla grande.
La Asamblea Nacional se celebrará el próximo doce de agosto en el Palacio de los Deportes ante diez mil delegados.