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TOLUCA, Edomex., 30 agosto de 2017.- Abel Alberto Romero Rubio ha sido detenido en tres ocasiones por agentes ministeriales sin presentar orden de aprehensión, además, de fabricarle delitos por robo de vehículo y portación de droga sin que le puedan comprobar algo.
El calvario para el joven originario de Toluca empezó el pasado 13 de enero cuando agentes de la Fiscalía General de Justicia del Estado de México lo presentaron ante el Ministerio Público acusado de participar en el robo de un automóvil en la colonia Ojuelos en Zinacantepec.
Pese a no comprobarle nada, estuvo en prisión durante tres días en tanto concluían las indagatorias, pero la hora y lugar nunca coincidieron, ya que en el momento señalado él se encontraba laborando en la empresa donde se ha desempeñado durante los últimos años en la ciudad.
Luego de ser dejado en libertad, la odisea continuó cuando un grupo de ministeriales que era encabezado por la misma persona lo volvió a arrestar al salir de su casa cuando se dirigía a su trabajo en la colonia San Buenaventura, ahora lo acusaron de posesión de enervantes sin comprobarlo.
Nuevamente tuvo que visitar los separados por la acusación; sin embargo, por la falta de las pruebas lo dejaron ir, por lo que sus sospechas en torno a que le querían fabricar un delito aumentaron, aunque al no deber nada no cambió su rutina observando que gente en coche lo seguía.
La última vez fue hace unas dos semanas cuando nuevamente fue privado de su libertad sin presentar un documento oficial, por lo que vive con miedo ante la persecución que existe en su contra, que incluso le ha hecho pensar en quitarse la vida por lo que ha vivido durante este año.
“No quiero seguir viviendo con miedo, cuando soy una persona que se dedica a trabajar, nada de lo que me acusan es verdad, quieren fabricarme delitos, no sé por qué, por eso pido que me ayuden, me acusan de algo que no he cometido en tres ocasiones”, relató este día la víctima.
Este mañana el empleado de un taller de impresión acudió a la Comisión de Derechos Humanos del Estado de México para levantar una queja por los hechos para que se castigue a quien resulte responsable al sentirse hostigado por los ministeriales antes de que termine en tragedia.