Edomex ya no es laboratorio político: Aldo Muñoz

TOLUCA, Edoméx, 6 de febrero del 2017.- Para el doctor en Ciencias Políticas, Aldo Muñoz Armenta, el Estado de México ha dejado de ser el laboratorio político electoral del país, porque el partido en el poder federal y estatal ha dejado de ser la fuerza sociopolítica absoluta y han perdido contiendas en varios estados y han provocado malestar entre la mayoría de la población mexicana, al margen de que haya aumentado el abstencionismo en más del 60 por ciento.

Más allá del sentir de la población en torno al PRI, la clase política mexicana se ha visto minimizada por seguir patrones ajenos a la realidad nacional, ya que están haciendo política marginal, muy alejada de la vida cotidiana de la ciudadanía, con una izquierda muy debilitada, prácticamente nula, con muchos conflictos de intereses internos, que no les permite avanzar con un proyecto político, ni proyecto de nación.

Al preguntarle su opinión sobre las coaliciones partidistas, en especial la que pudo darse entre el PRD y el PAN para contender en las próximas elecciones para elegir el 4 de junio al próximo gobernador del Estado de México, el también sociólogo por la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), explicó que las leyes electorales en México están diseñadas para que se gane en coalición, ya que un partido político no puede ganar por sí solo, porque el fin es fragmentar el voto, por eso hay tantos partidos en contienda, no sólo en el Estado de México, sino en todo el país.

Mencionó que pese a que dos partidos no tengan nada que ver en cuanto a ideología y organización social, pueden contender en conjunto en las urnas, aunque de ganar lleguen con una problemática de forma y fondo, toda vez que su único objetivo es quitar al partido en el poder. Las leyes electorales se los permiten, pero quien tiene la última palabra es la ciudadanía que vota.

Sobre esas leyes electorales, Muñoz Armenta explicó que nacieron con un espíritu vanguardista a nivel internacional, pero el uso de ellas en nuestro país no ha sido el adecuado y ahora se vean con muchos defectos que hacen verla como un acabado sistema partidocrático, porque existen partidos políticos sin representatividad, pero con estrategias que les permiten mantener su registro, al mismo tiempo que ayudan a fragmentar el voto e inclinándose hacia donde sus intereses se vean beneficiados.

Cuando le cuestionamos al también maestro en Ciencias Sociales sobre un posible levantamiento social, generado de tantas injusticias, “gasolinazos”, abusos de poder de los tres niveles de gobierno, entre una larga lista de quejas y denuncias ciudadanas, señaló que en este país es muy difícil que se concrete, porque permea la apatía, el desgano, la falta de civilidad política, carencia de activismo y sensibilidad social, pese a que en redes sociales se hagan de manifiesto, la verdad es que en las calles, a la mera hora, no se siente la masificación del conflicto, porque la gente lo ha perdido casi todo, o en su justa medida lo debe todo y no desea meterse en más problemas que van más allá de su círculo básico de sobrevivencia.

El docto en Ciencias Políticas agregó que detrás de toda movilización está un partido político, quienes son los encargados de provocar inestabilidad, a veces desde el partido en el poder, para hacer valer sus derechos partidarios y generar agenda social. En México pocas veces se ha visto una movilización desde la población, desde la ciudadanía, aunque cabe destacar que cada vez son más lo que se suman a la inconformidad masiva, pero estamos lejos de ser un país que desde la sociedad civil se resuelvan conflictos o problemas que aquejan a millones de personas. Se manifiestan miles, cierto, pero son millones lo que son afectados y para resolver cualquier instancia social, desafortunadamente, se debe hacer desde los partidos políticos, porque el sistema está diseñado así.

“Difícilmente se puede hacer un levantamiento social masivo en México, porque todo está focalizado”, sentenció.