Controlada bacteria Klebsiella Oxytoca en Edomex
TOLUCA, Edomex., 14 de abril de 2018.- Ya es fin de semana y si entre tus planes está conocer el Estado de México, algo que no puedes pasar por alto es su rica gastronomía, por eso te presentamos nuestro top ten y te deseamos buen provecho. ¡Comenzamos!
Toluca se caracteriza por su imponente coloso de nieve y su espectacular jardín botánico, pero qué tal si también te decimos que por un rico plato de chorizo, ya sea rojo o verde, pues es cocinado con altas dosis de chile y carne de res o puerco para darle un exquisito sabor, o si lo prefieres con un sabroso taco placero. ¿Te animas?
Gracias a su mítica zona arqueológica y su historia prehispánica, Malinalco es un municipio que no te puedes perder en territorio mexiquense. Por eso te recomendamos degustar la rica “trucha estilo Malinalco”, que se prepara rellena de jitomate, epazote, cebolla, ajo, mantequilla y chile, ahumada o envuelta en papel aluminio.
Si lo tuyo son los platillos exóticos y de origen cien por ciento natural, el chinicuil en salsa es tu mejor opción. Esta rica comida se prepara con carpa, epazote, chile verde y cebolla asada en hoja de maíz; además están los escamoles preparados en torta de chile verde. También no te puedes perder la torta de charal y el tlatonile, que se cocina con rebanadas de cebolla doradas a las que se les agrega tomate, chile y cilantro, así como papas en crudo y queso.
¿Alguna vez escuchaste hablar de los tamales de ollita o “chuchulucos”? Pues esta exquisitez es oriunda de Ocoyoacac y consiste en un tamal hueco relleno de salsa líquida y carne de cerdo, que se degusta acompañado de un buen jarro de atole.
Pues la salsa borracha no es un mito, ¡existe! y en Teoloyucan es imprescindible para acompañar carnes y toda clase de antojitos mexicanos; se prepara con chile ancho, mulato y pasilla, vinagre casero, piloncillo, hierbas de olor, ajo y cebolla.
La gastronomía de Texcoco se caracteriza por su alto nivel de condimentos, así como por sus raíces prehispánicas a base de aves como el ixcuintli, tepetxcuintli, guajolote, palomas, codornices, tórtolas, cacomixtle, hurón y tuza. Las cuales son asadas o cocidas y servidas en tamal.
La zona norte del Estado de México se caracteriza por su alimentación a base de maíz, muestra de ello es el atole agrio de raíces prehispánicas, que se toma en temporada de Semana Santa.
Los tamales de Judas son preparados con maíz azul tostado que se muele con canela o pinole y se amasa con miel de piloncillo, obteniendo una masa similar al Tzoatl (dulce de maíz para la temporada de Día de Muertos en tiempos prehispánicos); la pasta se unta en pequeñas porciones a las hojas de maíz, agregando antes para formar el tamal, ya cocidos se amarran por pares y se cuelgan en un mecate.
El afamado licor de frutas es una delicia que puedes degustar en el Estado de México, y no es más que un preparado con membrillo en combinación con zarza (frutillas rojas crecidas en arbustos), que a través del tiempo ha recibido el nombre de “chabelas” o “los siete brincos”.
Pues la región de Villa Victoria no se queda atrás y nos ofrece una rica variedad de dulces de leche o “lechitas”, jaleas de tejocote y ates de capulín, tejocote, pera, manzana, membrillo e higo.