Parquímetros en Ecatepec: ¿Solución o negocio disfrazado?

El 2 de junio de 2025, Ecatepec reactivó el sistema de parquímetros en el centro de San Cristóbal, tras cinco meses de suspensión cuando venció la concesión anterior.  Con mil 200 cajones tarifados de lunes a sábado (8:00–20:00 h), a 12 pesos la hora o 3 pesos por cada 15 minutos, se busca ordenar la movilidad urbana, liberar entradas a viviendas y reactivar la economía local.

¿Qué opinan los ciudadanos?

Desde la suspensión, reaparecieron los “franeleros” o “banquímetros”: figuras informales que cobran cuotas arbitrarias por estacionarse, e incluso recurren a amenazas para quienes no paguen. Frente a este panorama, las autoridades prometen que un sistema oficial restablecerá el orden y frenará abusos.

Por un lado, hay ventajas: el 20 por ciento de lo recaudado irá a mejorar la imagen urbana (5.5 km de calles renovadas), y los comercios afiliados, alrededor de mil 500, recibirán una comisión por recibir pagos. Además, con aplicaciones móviles, WhatsApp, puntos físicos y pagos telefónicos, se facilitará el acceso y la transparencia.

Sin embargo, el esquema plantea preguntas urgentes:

• Costo real para la población. ¿Quién asumirá el gasto recurrente de estacionarse? Con tarifas de 12 pesos/hora y multas (5 UMAs, unos 566 pesos por no pagar), los automovilistas podrían verse presionados a buscar alternativas informales o abandonar el centro.

• Empresa privada al mando. La concesión, de nuevo entregada a una empresa privada, deja dudas sobre la verdadera distribución de ingresos tras el primer año, en que el operador recibirá el 60 por ciento frente al 40 por ciento municipal, nivel de reparto que puede cambiar.

• ¿Movilidad o recaudación? Ecatepec enfrenta retos estructurales de transporte público, vialidad y seguridad. ¿Los parquímetros serán el detonante de un reordenamiento o un distractor de fondo que beneficie a unos pocos?

El programa incluyó la conformación de un comité con vecinos del centro histórico, lo cual es positivo. Sin embargo, hace falta que los beneficios se concreten: una aplicación móvil realmente útil, sanciones bien aplicadas y transparencia en el destino de los recursos. El usuario debe tener voz activa en decidir si los fondos se emplean en cruces seguros, limpieza, alumbrado o espacio público.

Los parquímetros oficiales representan un paso hacia el orden urbano y una respuesta a prácticas informales dañinas. No obstante, para que esta medida funcione:

1. Debe estar acompañada de inversión en transporte público y vialidad.

2. Los beneficios deben ser visibles y medibles para los residentes.

3. La concesión privatizada debe rendir cuentas claras.

De lo contrario, el riesgo es que se convierta en una medida más para favorecer intereses privados mientras los ciudadanos siguen pagando literal y figuradamente por circular en su propio municipio.

Tu opinión es clave: ¿Crees que los parquímetros mejorarán la movilidad o solo encarecerán la vida en el centro? ¿Qué obras o beneficios esperan que se financien con esos ingresos?